Ecopetrol informó que el oleoducto Caño Limón Coveñas habría sufrido un nuevo ataque a la altura de Tibú (Norte de Santander), en la vereda Guachimán. La empresa aseguró que, tras una “acción ilícita”, el crudo cayó sobre dos caños de la zona. Para controlar los daños y “como parte del plan de contingencia se protegió la bocatoma del acueducto del municipio de Tibú”.
Según un comunicado de Ecopetrol “se notificó a los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo y Desastres de Tibú, al Consejo Departamental de Norte de Santander, Secretaría de Salud Municipal, Corponor y a la Empresa Municipal de Tibú” para que se sumen al plan de contingencia que logre minimizar el daño ambiental.
El ataque a esta tubería de 780 kilómetros de longitud, que lleva el crudo desde los campos de extracción en Arauca, se presentó en la zona rural del municipio de Tibú. Según la entidad, la fuerza pública llegó hasta el lugar a verificar que en el lugar no haya amenazas, “para que técnicos de Ecopetrol ingresen al punto afectado para determinar las causas del derrame de crudo y la activación de dos puntos de control operativos en el afluente afectado”.
La empresa aseguró que rechaza enfáticamente este tipo de acciones. “Estas acciones ilícitas que ponen en riesgo la integridad de las personas, generan graves consecuencias al medio ambiente, afectan el bienestar de las comunidades y el normal desarrollo de las actividades petroleras.”, añadió el comunicado.