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La oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas presentó este martes, 11 de junio, el informe de 2018 sobre la situación de los líderes sociales en el país, específicamente en la región Caribe.
La organización criticó la ausencia del Estado en el territorio. Según la entidad, pese a los esfuerzos desplegados, no ha llegado de manera coordinada a las zonas más afectadas por la violencia. Ante esto, solicitó al Gobierno prestar mayor atención a las denuncias de los líderes y, asimismo, a prevenir que se sigan registrando agresiones contra ellos.
En el informe, presentando en La Guajira por Guillermo Fernández Maldonado, representante adjunto de la oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, también se mostró preocupación frente a los asesinatos de líderes sociales. En 2018 se registró el asesinato de 115 defensores, siete de ellos tuvieron lugar en el Caribe. La mayoría de los casos sucedieron en zona rural.
Por otro lado, desde inicios de año hasta el 7 de junio la organización recibió la denuncia de 76 homicidios en el país, de los cuales 26 han sido documentandos
Según un reciente informe del DANE, la región Caribe tuvo en 2018 la mayor incidencia de pobreza multidimensional, con un 33,5%; es decir, de cada 100 habitantes en el Caribe, 33 viven en situación de pobreza multidimensional. Ante este panorama, la ONU “pide que desde el Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022 se aborde la desigualdad con un enfoque de derechos humanos, y territorial que permita atender las realidades particulares" de esa región.
En el informe también se cuestionó la llegada de la Fuerza Pública a varias zonas del país. “Se sigue observando que el Estado llega (en ocasiones) solamente a través del Ejército, por lo que este debe desarrollar tareas que no son propias de su responsabilidad institucional, tales como la seguridad pública, la lucha contra el crimen organizado o el fomento de la convivencia y el desarrollo”. Este accionar, según la organización, puede representar un incremento en las violaciones de los derechos humanos
Las principales razones por las que asesinan a los líderes, según la ONU, son por denuncias sobre el accionar criminal, por apoyar el Acuerdo de Paz, la sustitución de cultivos ilícitos y por su razón de género, entre otros. De hecho, Colombia Diversa, ONG que defiende los derechos de la comunidad LGBT en el Caribe, registró dos casos de homicidio y seis de amenazas.
Los responsables de los hostigamientos serían antiguos miembros de estructuras paramilitares desmovilizadas (40 %), individuos no afiliados a ningún grupo criminal o grupo armado ilegal (18 %), integrantes del Eln (8 %), del EPL (4 %), Fuerza Pública (5 %), disidencias de las Farc (8 %) y personas por determinar (17 %).
La ONU criticó las acciones de los grupos ilegales armados que violan los derechos de la población civil. En el informe se hace un llamado para al "Gobierno y al ELN para que lo respeten, e insta a la guerrilla a que se abstenga de tomar rehenes, práctica prohibida por el derecho internacional humanitario”.
La oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas cuestionó la labor del Estado para defender a los líderes pese a las múltiples denuncias. Según el documento, muchos de ellos piden ayuda a la Unidad Nacional de Protección, pero en algunos casos, “las medidas de protección otorgadas a los defensores y defensoras no respondían a los riesgos y complejidades del contexto en el que estos desempeñaban su labor”.
La ONU recomendó a las autoridades fortalecer su sistema de investigación para sancionar a los autores de los crímenes y prestar mayor atención a las denuncian de los líderes.
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