A raíz de las protestas que se vienen presentando a lo largo del país en el marco del Paro Nacional, se ha generado un desabastecimiento en diferentes departamentos y municipios por cuenta de los bloqueos viales. Si bien el Valle del Cauca, Cauca y Nariño son algunos de los más afectados por esto, debido a la intensidad de las manifestaciones, en Norte de Santander se empiezan a sentir las voces de preocupación frente a estos temas.
En el departamento, arroceros, organizaciones campesinas y camioneros se han unido al Paro Nacional. Son dos las zonas críticas en las que persisten los bloqueos: la vía que comunica a Cúcuta con el municipio de El Zulia y en la Y de Astilleros. En el primer caso hay varios vehículos atravesados que cortan la comunicación con el occidente de Norte de Santander, en especial con Santiago, Gramalote, Lourdes, Salazar, Villa Caro, Arboledas y Cucutilla.
#ParoNacionalIndefinido desde #Catatumbo un pueblo que se moviliza pacíficamente, exigiendo soluciones a un gobierno, que le invierte más a la militarización en vez de desarrollo social y económico de la región.
— AscamcatOficial (@AscamcatOficia) May 5, 2021
Mientras tanto los arroceros y de más sectores agrícolas resisten pic.twitter.com/udfjdunaBu
También puede leer: Caravanas humanitarias con insumos médicos se desplazan por el país
Por otra parte, en la Y de Astilleros hace presencia la Asociación de Campesinos del Catatumbo (Ascamcat). Este bloqueo no permite el paso hacia Tibú y Ocaña. Los manifestantes de esta organización le están reclamando al Gobierno nacional el cumplimiento del programa de sustitución de cultivos ilícitos, una lucha de varios años de los campesinos, así como el rechazo a la fumigación con glifosato.
El Catatumbo es una de las zonas más afectadas por el conflicto armado en Colombia. Debido a su posición geográfica, que lo sitúa en plena frontera con Venezuela, hace que esta zona siempre haya sido apetecida por grupos armados al margen de la ley. Por esta razón, los campesinos consideran que el incumplimiento de los Acuerdos de Paz ha hecho que esta zona se vea inmersa nuevamente en una violencia incontrolable.
El año pasado el recrudecimiento de la violencia tuvo en jaque a Ecopetrol. La empresa, que ha ayudado a desarrollar el Catatumbo, estuvo a punto de cerrar sus campos en Tibú y Sardinata pues grupos armados ilegales atacaron sistemáticamente sus vehículos y medios de transporte, así como los pozos de petróleo y gas.
De igual forma, en varios municipios, como Tibú, se presentaron desplazamientos de personas debido al accionar de estos grupos armados ilegales. Desde la salida de la exguerrilla de las Farc la zona entró en disputa por parte de diferentes actores, como las disidencias, el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y otras células que buscan hacerse con el control de las rutas del narcotráfico que pasan por esa zona.
Si bien Juan Carlos Quintero, miembro de Ascamcat, aseguró que se reactivó un corredor humanitario en las zonas para que puedan ingresar camiones con productos agrícolas, la sensación de escasez en varios municipios de Norte de Santander, pero en especial en la capital del departamento, se empieza a sentir.
“Estos bloqueos originan escasez de varios productos como fresa, papa, uva, papaya, cacao, azúcar, panela y el incremento en los precios de verduras y hortalizas”, le dijo Wilmar Tarazona, representantes de los supermercados de Cúcuta, a RCN Radio.
Le puede interesar: En Cali se están robando el combustible de forma artesanal
En el Valle del Cauca, Nariño y Cauca ya se están empezando a ver las primeras consecuencias del desabastecimientos. En Cali iniciaron las denuncias de robo de combustible de las estaciones de servicio ante la escasez del líquido. En Norte de Santander se teme porque esto mismo suceda con los alimentos en caso de que no logren pasar los diferentes bloqueos que hay en estas vías.
Por esta razón, la Defensoría del Pueblo hace presencia en estas zonas donde dialoga con los manifestantes para que habiliten un carril de la vía para que puedan pasar los camiones que vienen cargados de comida desde la costa Caribe colombiana.