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Denuncian ‘envejecimiento prematuro’ en algunas zonas del nuevo Puente Pumarejo, en Barranquilla, que está siendo construido sobre el río Magdalena.
El ingeniero civil Rodrigo Grass alertó sobre la aparición de grietas y fisuras en las bases de la estructura, alegando que esa situación podría afectar la vida útil de la megaobra de 750 mil millones de pesos, cuya entrega está programada para diciembre de siguiente año.
Para el experto, se sabe que el daño está siendo reparado por los contratistas, pero se cuestiona la calidad de los materiales utilizados por lo que este tipo de situaciones no pueden presentarse en un proyecto nuevo y sin entregar.
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Según Carlos Rosado, vocero para Colombia de Sacyr, se trata de “dificultades de acceso por parte del concreto en donde hay gran concentración de acero por metro cúbico (…) el avance de Pumarejo a diciembre será del 70% y esperamos entregarla a finales del 2019”.
Rosado asegura que estas anomalías se pueden tratar a través de un procedimiento establecido con los productos adecuados y avalados para tal fin, “como viene recogido en el código colombiano de puentes CCP-95. En vista de que la oquedad es a nivel de recubrimiento del acero de refuerzo, no existe ningún problema que comprometa la estructura”.
Las obras del nuevo puente que conectará a los departamentos de Magdalena y Atlántico están siendo ejecutadas por Sacyr Colombia.
La Sociedad Colombiana de Ingenieros del Atlántico y Sacyr consideran que la situación no es de riesgo y que es normal dentro de un proyecto de este tamaño. También destacaron que la ciudadanía ha estado pendiente de vigilar la calidad del trabajo que se realiza y a través de las redes sociales denuncian cualquier anomalía. “No representan peligro” debido a que se tratan de “detalles propios de una construcción”, aseguran.
“Si no hay plata para terminar la obra hoy día, imagínese dentro de 10 años, cuando el concreto esté desgastado no habría dinero para repararlo (…) las grietas y fisuras se pueden sellar bien para evitar que “la estructura se debilite y el acero de refuerzo se deteriore”, comunicó a El Heraldo Rodrigo Grass.
“Esta obra tiene una interventoría seria. Hace algún tiempo (2016) se presentaron unas grietas, pero estas fueron producto de la temperatura que alcanzó el concreto al momento del vaciado y allí se tomaron los correctivos pertinentes”, dijo Alberto Pedroza Goenaga, presidente de la junta directiva de la Sociedad Colombiana de Ingenieros del Atlántico, según reporta El Heraldo.