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La propuesta del Gobierno para que todas las ciudades tengan ciclorrutas

Un documento de 234 páginas es la hoja de ruta para que las urbes se adapten a las bicicletas. La semaforización, los estacionamientos, la iluminación y la arborización, algunas de las necesidades más importantes.

Pilar Cuartas Rodríguez
10 de marzo de 2016 - 09:38 p. m.
/ Foto: tomada del informe "Guía ciclo-infraestructura para ciudades colombianas".
/ Foto: tomada del informe "Guía ciclo-infraestructura para ciudades colombianas".

Hace dos años, el activista de la bicicleta y funcionario de la Secretaría de Movilidad de Bogotá César Criollo Preciado fue asesinado en Flandes (Tolima), por sujetos que intentaron robarle su bicicleta. El homicidio del ingeniero no solo generó indignación y rechazo en la sociedad, sino que reavivó el debate sobre la seguridad en las vías para los ciclistas.

El sueño de Criollo siempre fue convertir la bicicleta en un medio de transporte alternativo para los ciudadanos. Y para eso trabajó siendo el artífice de proyectos como el BiciCarril de la Calle 85, la Mesa de Trabajo Ciclomotores y el diseño del ciclo-parqueadero en la capital del país.

Este año y en su memoria, el Ministerio de Transporte diseñó una guía para que todas las ciudades adecuen sus calles a las bicicletas y promuevan el uso de estas. El documento de 234 páginas, que será lanzado en las próximas semanas y que conoció El Espectador, da recomendaciones puntuales sobre cómo diseñar una infraestructura que incluya a las bicicletas. La propuesta contó con la participación de expertos nacionales, como las organizaciones Despacio, Gea21 y Bicivilízate, e internacionales como Klaus Bondam, director de la Federación Danesa de Ciclismo, y Claudio Olivares Medina, de Santiago Chile.

Garantizar una movilidad segura y eficiente de las personas, disminuir las emisiones de gases efecto invernadero, cambiar los métodos de suministro de energía y disminuir los riesgos asociados al sedentarismo son algunos de los objetivos de esta iniciativa. “La bicicleta es una de las más equitativas formas de moverse, es un vehículo con espíritu social...Para distancias superiores a 0,5 km e inferiores a 5 km es más rápida que cualquier otro medio de desplazamiento”, puntualiza el informe.

Se plantean, además, los distintos mecanismos para diseñar parqueaderos, señalizar y educar de las personas. Quedan explicadas también las alternativas que cada ciudad puede implementar para abrirle paso a las bicicletas en las calles. Por ejemplo, están las ciclorrutas que son vías reservadas y separadas del resto del tránsito y peatones, y los carriles compartidos entre buses y bicis. Para este último "es necesario que se garantice la comodidad y seguridad de ambos. El otro factor crucial de esta opción es la velocidad de los autobuses, que no debe superar los 40 km/h para facilitar la convivencia”, dicen los expertos.

Otro factor que deben considerar las urbes es que existen otros tipos de bicicletas cada vez más frecuentes, como los triciclos o remolques, y otros vehículos no motorizados, como sillas de ruedas o patinetas.

Foto: tomada del informe "Guía ciclo-infraestructura para ciudades colombianas". 

Hay una advertencia importante: los puentes vehiculares se deben adaptar a las bicicletas. “Estos puentes suelen ser los cuellos de botella en la estructura de las ciclorredes, ya que muchas veces no hay una alternativa razonable y el ancho es limitado, de modo que es difícil implantar bandas para los ciclistas”. Asimismo, la calidad del pavimento es una variabe para tener en cuenta.

Conclusiones principales

Señalización: una buena ciclo-infraestructura debe disponer de una señalización única, completa y coherente. Por ejemplo, las señales preventivas que avisan que se acerca un cruce con otros ciclistas.

Semaforización: la señalización de las intersecciones con semáforos también tiene que adaptarse a la presencia de ciclistas. Se trata de semáforos que se dirigen exclusivamente a los ciclistas y otros que regulan el paso para bicicletas cuando la vía se cruza con la de los peatones.

Turistas: la señalización turística está dirigida a la promoción del patrimonio artístico y de las actividades culturales y de ocio. Existe ya un sistema de señalización turística, que está revisando el Ministerio de Turismo y que se está adaptando en centros históricos.

Alumbrado: debe garantizar la visibilidad del ciclista, y que éste detecte la presencia de obstáculos en la vía, así como de otros usuarios, peatones, y cualquier otro elemento que pueda interferir con su trayectoria.

Arborización: plantar árboles y plantas ornamentales mejora el paisaje y contribuye a la calidad de vida. Esto requiere de un proyecto específico en el que intervengan técnicos especialistas, como son los ingenieros forestales o paisajistas.

Estacionamiento: las bicicletas pueden ubicarse en espacios privados (depósitos de bicicletas, garajes, etc.) o en espacios públicos, y suelen ser de acceso restringido. Aunque en algunos casos no es necesario cobrar por el estacionamiento, hay otros donde sí es necesario cubrir los costos de operación. Es importante poder establecer desde el Gobierno los niveles de cobro autorizados para evitar tarifas excesivas.

Estaciones de transporte público: todas las estaciones de transporte público, y en particular las estaciones terminales deberían tener espacios de estacionamientos para bicicleta que sean protegidas de la intemperie, con servicios de seguridad y con servicios adicionales como reparaciones y venta de accesorios, que pudieran convertirse, en algunos casos, en Centros de la Bicicleta, tal y como ocurre en otros países.

Transporte de bicicletas en los vehículos: Hay tres opciones para transportar las bicicletas en los vehículos de transporte público:
»»En el exterior, en un soporte especial
»»En el interior, en un espacio dedicado al efecto
»»En el interior, en bodegas o compartimentos especiales

Con esta promesa, los habitantes de las ciudades colombianas, hombres y mujeres, tendrían la posibilidad de transportarse libremente y de manera segura sin importar su edad o si van para el trabajo o el cine.

Del deporte a la pobreza

La bicicleta es un ícono en Colombia, pero los imaginarios sobre ésta han ido cambiando. A finales del siglo XIX se asociaba con fines recreativos y deportivos, en la primera mitad del siglo XX como medio de transporte y hacia el final del siglo pasado era usada mayoritariamente por la población de bajos ingresos. Oficios como el ser vigilante, jardinero, constructor, reciclador de basura o vendedor ambulante referían a las bicicletas.

Sin embargo, en los últimos años se organizaron grupos sociales que empezaron a reclamar la bicicleta como medio de transporte urbano, por sus beneficios ambientales y contribución a la calidad de vida de los ciudadanos. “Ese cambio de discurso hacia el uso cotidiano se retroalimentó y sigue retroalimentándose con el éxito de las ciclovías recreativas, dominicales y nocturnas… Se estima una asistencia promedio de un millón cuatrocientas mil personas a las ciclovías de Bogotá, cada domingo y festivo”, agrega la hoja de ruta liderada por el Gobierno.


Datos claves

*El Gobierno Nacional incluyó por primera vez a la bicicleta de manera explícita en un plan de gobierno en el Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018.

*Una ciudad ciclo inclusiva es aquella en la que cualquier persona puede utilizar la bicicleta de manera segura y cómoda para todos sus desplazamientos.

*El uso de la bicicleta ayuda a reducir las emisiones del transporte y mitigar el cambio climático.

*Uno de los casos más exitosos de participación ciudadana la tiene Medellín en la Avenida Palacé. Los ciclistas plantearon un proyecto de cicloruta e implementaron una estrategia de sentarse en los andenes de la avenida a realizar yoga, bailar y leer.

*En Bogotá se debe destinar un estacionamiento de bicicletas por cada 10 estacionamientos de vehículos.

*Caso exitoso de concientización: la Secretaría de Movilidad de Bogotá realizó una campaña de educación para los conductores de taxi. Los participantes fueron los taxistas con mayores comparendos y se les solicitó que se transportaran por un tramo de la ciudad en bicicleta. Esto permitió que los conductores entendieran las problemáticas que presencian los ciclistas en la ciudad y se espera que sean más tolerantes y respetuosos con los mismos.

 

Por Pilar Cuartas Rodríguez

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