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La Alcaldía de Bucaramanga y la de Girón, junto a la Empresa de Aseo de Bucaramanga, Emab, y la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, Cdmb, tienen 30 días para buscar un nuevo lugar que reemplace al relleno sanitario El Carrasco.
El juez, Édward Avendaño, encargado del caso afirmó que estas autoridades, el 29 de noviembre, en audiencia ante el juzgado 15 Administrativo de Bucaramanga, deberán exponer el sitio que sustituirá al basurero, además de presentar un informe técnico sobre la estabilidad de las celdas.
Cabe recordar que desde el 2002, la comunidad afectada ha pedido el cierre inmediato del sector, que está funcionando desde 1978, y el cual es el responsable de ocasionar malos olores al igual que enfermedades respiratorias y cutáneas.
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En 2011 mediante un fallo del Tribunal Administrativo de Santander se ordenó “el cierre inmediato del relleno sanitario El Carrasco”, acto que no ha sido realizado por las distintas autoridades. Por esta razón, el juez indicó “no voy a aceptar ningún decreto de emergencia, solo para seguir postergando en el tiempo la operación de El Carrasco. Esto no está en negociación”.
El pasado 3 de octubre ocurrió el derrumbe de 30 mil toneladas de basura en este relleno sanitario. No obstante, las autoridades competentes como la Cdmb en cabeza de su director, Martín Camilo Carjaval, ya habían advertido sobre lo que podría ocurrir en el sitio. “En los informes que enviamos a la Anla (Autoridad Nacional de Licencias Ambientales) dejamos en evidencia todo lo que podría ocurrir en el sitio. Siempre hemos dicho que El Carrasco debe cerrarse porque ya no aguanta más. De hecho, no cumple con las condiciones para ser un relleno sanitario”, comentó a El Espectador.
Las comunidades han pedido al gobierno buscar una alternativa a este sitio que recibe a diario, 1.000 toneladas de basura de 20 municipios, incluyendo el área metropolitana de Bucaramanga, y que actualmente se encuentra en estado de emergencia ambiental, hasta agosto de 2020.
El alcalde de Floridablanca, Héctor Mantilla, afirmó a El Espectador que “con el último derrumbe quedamos preocupados por la situación del sitio, por eso ordenamos una revisión de lo sucedido. No sabemos qué pueda suceder si seguimos utilizado este sitio".
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