Precisa el informe "Demanda por servicios públicos domiciliarios en Colombia y subsidios: implicaciones sobre el bienestar", publicado en la página web del Banco Central que si se decidiera cambiar de sistema, eliminando los estratos y utilizando un mecanismo de focalización como el Sisbén, transfiriendo a cada hogar su respectiva variación compensada, se ahorrarían cerca de 40 millones de dólares al año, a cambio de una inversión aproximada de 7 millones de dólares cada quinquenio.
El informe admite las limitaciones del Sisbén y los costos que demandaría una actualización del sistema.
El estudio precisa que en el caso del agua se utilizó información para nueve ciudades y sus respectivas tarifas: Bogotá, Medellín (y su área metropolitana), Barranquilla, Cartagena, Santa Marta, Cúcuta, Bucaramanga, Cali y Pasto.
Considera el informe presentado por el Banco de la República que al mostrar cada uno de los estratos, "el consumo se incrementa a medida que éste es cada vez más alto". También el número de baños, garaje, terraza y jardín, "tienen una influencia positiva en el consumo del recurso".
Aclara el informe que en el caso del consumo de electricidad sólo se utilizó información de Medellín (y su área metropolitana), Cali, Bogotá, Bucaramanga, Pasto, Cartagena y Barranquilla. Los resultados muestran que, salvo por la variable garaje, todas las demás son estadísticamente significativas; incluso, el número de cuartos y baños, o contar con terraza, tienen un efecto positivo sobre dicho consumo.
Explica el informe que partiendo de una estimación sencilla de la pérdida irrecuperable total en subsidios a los servicios públicos domiciliarios, que asuma que en las zonas urbanas ésta es similar a la que se presenta en el conjunto del país, se tendría que la pérdida irrecuperable sería igual a 18,1 millones de dólares en agua, y a 19,4 millones de dólares en electricidad.