El Magazín Cultural

"Gimme the Power, ¡viva México cabrones!"

Algunas de las grandes luchas y transformaciones de los últimos siglos han estado acompañadas por canciones o sinfonías que han unido a los pueblos o a los ejércitos. Presentamos las historias de 13 de ellas.

Andrés Osorio Guillot
06 de agosto de 2018 - 07:59 p. m.
 Con “Gimme the Power”, Molotov se logró consolidar como un referente del rock contestatario en México. / Cortesía
Con “Gimme the Power”, Molotov se logró consolidar como un referente del rock contestatario en México. / Cortesía

 

Perteneciente al álbum ¿Dónde jugarán las niñas?, “Gimme the Power” se convirtió en una canción emblema de la protesta y la indignación con la corrupción y el autoritarismo de los gobiernos latinoamericanos.

Desde la década de los 60, el rock mexicano ha pretendido mantener su legado como un movimiento musical contestatario. Los malos manejos estatales y la nefasta relación entre el poder y los gobernados llevó a distintas bandas a construir un escenario de ocio y de generación de conciencia alrededor de las problemáticas sociales, políticas y culturales. Las mayores manifestaciones de indignación y reprobación por parte de los rockeros se dio en el Festival de Rock y Ruedas de Avándaro en 1971, pues allí se reunían las bandas más importantes del momento en torno a los solos de guitarra y batería que acompañaban la furia de quienes pensaban diferente y de quienes veían en el arte un escape a una realidad poco agradable. “Abuso de autoridad”, una canción de la banda Three Souls in My Mind, es uno de esos resultados que surgieron del rock and roll y su masiva aceptación por parte de los jóvenes mexicanos.

Puede leer: “La Internacional”: la canción es la mejor propaganda

“Una larga noche” fue el nombre que se le dio a una época en la que el rock fue censurado por el Gobierno de México. Durante diez años se prohibieron los eventos al aire libre y los medios de comunicación censuraron la música de bandas icónicas del rock como The Beatles. Así, la fuerte tendencia dictatorial del Estado logró cortar de raíz el discurso artístico que el rock buscaba promover mediante sus notas y sus letras comprometidas con la igualdad social y la expansión de la corrupción en todas las esferas del poder.

Tuvieron que pasar 25 años para que el rock se incrustara de nuevo en el suelo mexicano para remover un territorio que ya estaba inmerso en el narcotráfico, la violencia y la corrupción. De las manos incendiarias e inconformes de Micky Huidobro, Iván Moreno “La quesadillera”, Jay de La Cueva e Ismael “Tito” Fuentes nacería Molotov como una banda capaz de reunir una nueva sociedad que venía de ser fragmentada a causa de la desesperanza de la impunidad y la falta de ética en el Estado.

El humor, la irreverencia y la valentía de enfrentar un tiempo incierto y de diversos desequilibrios catapultó a Molotov como un movimiento cuyas canciones simbolizaban el reflejo y el punto en común de sus declaraciones con el malestar general de la sociedad mexicana de mediados a finales de la década de 1990. Con “Gimme the Power”, la agrupación no solo lograba consolidarse como un referente del rock contestatario en México, sino que lograría unificar las voces y los contrastes que marcaban la podredumbre provocada por la corrupción y el intenso vicio del abuso de poder de la burocracia y las hegemonías presentes en los gobiernos de América Latina.

 

 

Por Andrés Osorio Guillot

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar