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Los legisladores de la Alianza Verde, Antanas Mockus y Katerine Miranda, se preparan para continuar una batalla difícil en el Congreso. Se trata del proyecto de ley que prohibiría la venta de pólvora en las calles a nivel nacional, restringiendo su uso solo para quienes estén capacitados en manipularla.
Según el Instituto Nacional de Salud (INS), el uso descontrolado de la pólvora en el pasado mes de diciembre dejó a 625 personas quemadas a nivel nacional. Frente a este panorama, los congresistas prendieron las alarmas y anunciaron a través de sus redes sociales que seguirán luchando por sacar adelante este proyecto de ley.
“Este es un proyecto de ley que se ha caído tres veces. Esperamos que esta sea la vencida. Creemos que cuidar la salud de los niños es una prioridad", comentó la representante Miranda. Más de 200 menores de edad resultaron lesionados a cuenta de la pólvora en este diciembre.
Asimismo, la representante de los verdes manifestó su preocupación al denunciar el lobby que ha hecho el gremio polvorero para impedir que avance la iniciativa en el Congreso. “Creemos que hay una buena disposición por parte de los partidos políticos, sin embargo, hemos visto cómo el gremio ha hecho un lobby impresionante”, aseguró.
El proyecto de ley prohíbe los artefactos menos potentex como las chispitas mariposas, los totes, voladores; igualmente, restringe el uso de la pólvora de categorías altas a las personas que certifiquen los requisitos para hacer un uso profesional de esta. Quien infrinja esta disposición tendrá que pagar de 80 a 200 salarios mínimos legales vigentes, que equivaldrían de $66.000.000 a $165.000.000.
La iniciativa, que le restan tres debates para convertirse en una ley, es un propósito del senador Mockus que pretende lograr los mismos resultados que obtuvo siendo alcalde de Bogotá al prohibir el uso de la pólvora en diciembre de 1995. Cada año, desde la vigencia del decreto, el pabellón de quemados del Hospital Simón Bolívar registró una reducción en la atención a los quemados.
También: Solo una persona resultó quemada por pólvora en Bogotá durante año nuevo.
Desde el gremio polvorero apoyan la regulación de la pólvora ilegal, no obstante, no comparten la prohibición de esta a nivel nacional. Como contrapropuesta, piden para que se impulsen medidas pedagógicas y no restrictivas. “Hay que trabajar por una pirotecnia responsable, legal y segura”, comentó Carlos Andrés Carvajal, presidente de la Federación Nacional de Pirotécnicos, a W Radio.