Así se declararon los partidos frente a los gobiernos departamentales y locales

Hasta el pasado 3 de enero, los partidos políticos tuvieron plazo para notificar su posición respecto a los gobiernos departamentales y locales. / Getty Images

Luego del proceso electoral del pasado 27 de octubre y de que se posesionaran los mandatarios territoriales y locales en  gobernaciones y alcaldías, aún quedaba un paso por cumplir para que se pudieran establecer las dinámicas políticas en cada región del país: la declaración política por parte de los partidos frente a los candidatos que llegaron al poder y que permanecerán en él durante los próximos cuatro años. 

Este es un procedimiento que quedó determinado en el Estatuto de la Oposición y tiene como objetivo garantizar los derechos a los partidos y colectividades que se declaren en oposición a los gobiernos. Aunque la norma tiene muchos baches que deberán ser saldados por el Congreso de la República, algunas garantías que tendrán los movimientos son, por ejemplo, el acceso a recursos adicionales para apoyar el ejercicio opositor o el derecho a réplica al presidente de la República, en el caso de los partidos que están en el Congreso. 

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En cumplimiento de esa ley, todos los partidos políticos que llegaron a las corporaciones regionales debieron hacer su declaración ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) hasta el pasado 3 de febrero. Razón por la cual el tribunal electoral continúa hasta el momento en el procesamiento de la información proveniente de los más de 1.000 municipios y 32 asambleas que tiene el país. El común denominador, al menos en los principales departamentos, es que hay una mayoría de colectividades que se declararon de gobierno, como el caso de Cundinamarca, Caldas, Valle del Cauca, Atlántico y Antioquia.

Un panorama parecido sucede en las capitales principales, como Medellín, Cali o Barranquilla. En Bogotá, el escenario es particular, en donde la gran mayoría de partidos se declararon como independientes. 

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Otros casos muy puntuales llaman la atención, porque dejan entender cómo funcionan las dinámicas políticas. Ese es el caso del Centro Democrático, en Bolívar. Ese partido le retiró el apoyo al entonces candidato y hoy gobernador Vicente Blel Scaff, luego de que se conocieran los audios que dejaban en evidencia a Vicente Blel Saad, padre de este, en el que contaba detalles de cómo funcionaría una red de corrupción en Cartagena y ese departamento en el que él mismo tendría participación. 

Muy a pesar de que en su momento la directora de esa colectividad, Nubia Stella Martínez, calificó como grotescos los audios y se mostró dispuesta a retirar incluso el aval (asunto que no era posible jurídicamente), el uribismo se declaró como partido de la coalición de gobierno que acompañará a Vicente Blel Scaff junto a la ASI, el Conservador, el Liberal y la U.