Cámara le da el sí al proyecto que busca fortalecer las revocatorias de mandato

La Cámara aprobó en segundo debate el proyecto que busca fortalecer las revocatorias del mandato.

La Constitución de 1991 incluyó en el ordenamiento colombiano la figura de la revocatoria del mandato. Sin embargo, desde su instauración, solo ha llegado a buen término un solo proceso para sacar de su cargo a un alcalde. El resto no ha terminado en las urnas o ni siquiera ha tenido la participación necesaria para que tenga validez.

Por eso, desde el Congreso se está tramitando un proyecto de ley estatutaria para fortalecer esta figura. Este martes, la plenaria de la Cámara le dio el segundo sí de los cuatro que necesita para convertirse en ley. Sin embargo, tiene el tiempo contado, debido a que, como ley estatutaria, solo puede discutirse en la legislatura que fue radicado. Esto implica que antes del 20 de junio debe ser aprobado por el Senado o el esfuerzo será en vano.

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El proyecto como tal, que tuvo una acogida mayoritaria, propone varias reformas para fortalecer esta figura, entre ellas está habilitar más razones para acceder a esta. Actualmente, la ley solo permite la revocatoria en caso de incumplimiento del plan de gobierno e insatisfacción general. Pero el texto aprobado en esta jornada también contempla que se convoque a esta figura por incumplimiento del plan de desarrollo.

En este tema hubo uno de los pocos debates frente al proyecto. Por un lado, el representante Inti Asprilla pidió seguridad para que no se inhabilite la insatisfacción como razón suficiente para acceder a la revocatoria. En cambio, la representante Adriana Magali Matiz criticó el tema de la insatisfacción, debido a que supuestamente esta se usa para revanchismos de los que perdieron en elecciones.

Luego del breve debate, que no tomó mucho tiempo, el artículo habilitó la revocatoria tanto por incumplimiento como insatisfacción. Aunque se recordó que la Corte Constitucional ha dicho en distintas ocasiones que la insatisfacción que habilita las revocatorias debe basarse en el incumplimiento del plan de gobierno.

En otros artículos, el proyecto crearía una serie de pasos a seguir para entregar los listados de la financiación de las revocatorias. Como nuevo punto, la propuesta apunta a que se permitan las correcciones en posibles inconsistencias en las cuentas y define unos tiempos para su análisis. Este apartado es importante, puesto que el tema de la financiación ha frenado algunos procesos de revocatoria, como la de Enrique Peñalosa.

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La iniciativa también propone la creación de una audiencia pública tras avalarse las firmas que permita exponer los argumentos a favor y en contra de la revocatoria. Este hecho fue algo criticado debido a que podría ser un palo en la rueda a que se llegue a las urnas. Sin embargo, se dejó claro que la audiencia no es necesaria para que se lleve a cabo el proceso electoral y en estos espacios no se pueden tomar decisiones en contra de la convocatoria.

Por último, el texto aprobado dejó claro que no se afectará a los procesos de revocatoria que se están llevando a cabo en estos momentos. Uno de los argumentos para este punto es que no se les puede cambiar las reglas de juego a las personas que buscan la revocatoria y a los que se verían afectados por esta.

En el debate de esta tarde hubo un breve espacio para hablar de las revocatorias actuales. Varios representantes, entre ellos John Jairo Berrio, expusieron que actualmente, por la pandemia, no hay garantías para la recolección de firmas. Por eso, expresaron que se le debería dar más “dientes a la revocatoria”, aunque este tema no fue tratado en el debate.