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Finalmente la Cámara de Representantes decidió sobre la moción de censura convocada por la oposición para sacar del cargo a Guillermo Botero, ministro de Defensa. Este jueves, la plenaria de esa corporación negó el recurso. Con 121 votos a favor de su gestión, y solo 20 en su contra, Botero se queda.
“Gracias por las caras amables que me han venido acompañando con su solidaridad y afectos. Y ni qué decir del apoyo de mis generales que estuvieron atentos. A ellos y a los amigos de Cambio Radical, partido de la U, a los liberales, al Partido Mira, Centro Democrático, muchísimas gracias porque me acompañaron con su voto. Para todos, mis sentimientos de aprecio”, dijo Botero para cerrar el asunto.
La moción se votó luego de un carrusel de conciliaciones en los que se aprobaron los acuerdos sobre leyes como la que prohíbe el asbesto, la promoción del uso de vehículos eléctricos, y la de la gestión y transparencia en el sistema de salud. Así mismo, no se debatió nuevamente sobre las razones a favor y en contra de Botero, dado que ese espacio ya se había dado el pasado martes, y en él tanto la oposición como el propio ministro pasaron al estrado y ofrecieron sus argumentos por más de tres horas.
Y como registró este diario, desde un principio la moción de censura que citaron representantes como Juanita Goebertus, Inti Asprilla, Fabián Díaz, Katherine Miranda, Mauricio Toro (del Partido Verde), John Jairo Cárdenas (de la U), y María José Pizarro (de los Decentes), entre muchos otros, no tuvo ambiente para prosperar en el Congreso. Pasó, por ejemplo, en partidos como el Liberal y la U: mientras un grupo quería sumarse a la iniciativa de la oposición, otros consideraron que el recurso no sería exitoso, razón por la cual muchos decidieron no dar la pelea esta vez.
Para ampliar: no hay ambiente para la moción de censura contra mindefensa
La moción de censura se iba a presentar el 15 de mayo. De hecho fue radicada. En su momento, los representantes opositores presentaron evidencias centradas en las fallas de Botero frente al asesinato de Dimar Torres, el desmovilizado muerto en manos del cabo del Ejército Daniel Gómez. Sin embargo, a raíz del artículo de The New York Times, en el que el diario estadounidense reveló directrices del Ejército que darían paso al posible regreso de las ejecuciones extrajudiciales de 2006, la oposición decidió retirar el informe para incluir dichas pruebas.
Así, la moción se debatió el pasado martes. Una de las barras del Congreso fue ocupada en su totalidad por los miembros de la cúpula militar que acompañaron al ministro en la discusión. Y, pese a que Botero hizo una intervención de 50 minutos, para Juanita Goebertus, la conclusión sobre sus respuestas fue que el jefe de la cartera de Defensa no respondió los temas centrales por los que fue citado.
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“Omitió los formatos de evaluación de resultados. Repitió lo que dijo el cabo involucrado en el asesinato de Dimar Torres, pero su responsabilidad política está muy superior. Tampoco se refirió a sobre qué pasa con la existencia del conflicto armado y la inmensa potencialidad de riesgo que le está generando a los miembros de la Fuerza Pública. Y no dijo nada sobre la disminución de la exactitud en las operaciones”, fueron las consideraciones que compartió con la sala Goebertus.
La moción de censura se vio también envuelta en el novelón en el que se convirtió la llegada al Congreso de Seuxis Paucias Hernández Solarte, mejor conocido como “Jesús Santrich”. Quizá, este pudo ser un motivo por el que el recurso quedó opacado y no prosperó. Con todo y eso, “Santrich” hizo parte de la votación y apoyó la moción, sumando uno de los pocos votos en contra de Botero. Se sabía que, sin el respaldo total de alguna de las bancadas declaradas independientes, sería muy difícil que los números dieran para sacar al ministro.
En todo caso, el resultado coincidió con los cálculos de hace semanas. Christian Garcés, representante del Centro Democrático, demostró su agrado con la decisión de la Cámara.