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El presidente Iván Duque reiteró su llamado a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para que se tenga celeridad en el esclarecimiento de los delitos cometidos en el marco del conflicto armado y, aclarando que no pretende irrespetar la independencia de las otras ramas del poder público, planteó la posibilidad para que ese tribunal impida que quienes sean juzgados por delitos de lesa humanidad puedan aspirar a cargos de elección popular.
“Como Gobierno Nacional hemos cumplido con nuestras obligaciones, hemos cumplido con los aportes económicos, también hemos cumplido con los principios de colaboración armónica; pero debemos insistir en el clamor de celeridad, para que, en virtud de la celeridad, los ciudadanos vean que hay verdad, justicia, reparación y no repetición”, expreso el jefe de Estado este martes, durante la posesión de Diana María Vega como nueva magistrada de la Sala de Justicia de la JEP.
Y agregó: “Hay grandes expectativas en materia de verdad, justicia, reparación y no repetición. No pretendemos invadir ni el fuero, ni la independencia de ninguna rama del poder, ni de ninguna institución, pero sí en virtud de nuestra carta política hacer un llamado respetuoso y claro para que se pueda acelerar frente a la expectativa del pueblo colombiano, la verdad sobre crímenes abominables”.
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El primer mandatario insistió en la necesidad de que pronto se vean resultados en delitos como el reclutamiento de menores o la violación sistemática de mujeres que fueron reclutadas. “Colombia ha sido un país golpeado brutalmente por la violencia a lo largo de su historia y, como lo hemos dicho en muchísimas ocasiones, uno de los errores que ha estado constantemente en la historia nacional, cuando se ha invocado la palabra paz, ha sido el fenómeno de la impunidad”.
Agregó que el país ha tenido que vivir “las guerras más crueles de nuestra historia”, pero fue enfático en decir que “cuando esas guerras han llegado a su fin, poco o nada se ha visto de justicia efectiva para quienes han acudido a las formas más brutales de aniquilamiento, de persecución, frente al ser humano”. Para Duque, debe haber una reparación efectiva, más cuando los máximos responsables deben aportar recursos efectivos para la reparación de las víctimas: “No hacer esos aportes constituye en sí mismo una violación flagrante de los principios a los cuales se hicieron acreedores”.
Por otra parte, el presidente volvió a lanzar duras palabras en contra de los disidentes de las hoy desmovilizadas Farc, recalcando en el término de “Narcotalia”: “Hhoy debemos todos rechazar categóricamente a esos criminales, a esos bandidos miserables que le vendieron cara de paz al pueblo colombiano y que hoy hacen parte de la ‘Narcotalia’. A Santrich, a Márquez, a Romaña a ‘Granobles’, al Paisa y a ‘Iván Mordisco’, sujetos que propiciaron una apariencia de paz cuando lo que estaban era fraguando su retorno a las actividades criminales”.
Y nuevamente, ante las recientes solicitudes de exjefes paramilitares como Salvatore Mancuso para ingresar a la JEP, ratificó su postura de que no deben ser aceptados: “Criminales de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) están buscando a toda costa con toda suerte de presiones, encontrar una legitimación de su anhelo de entrar a la justicia transicional, para ellos mismos poder gozar de beneficios de excarcelación o inclusive, aún más grave, gozar de principios de no extradición sobre la supuesta entrega de verdad, que ya de por sí es un compromiso de Justicia y Paz”.