FARC ratifica distancia y se desmarca de “Martin Sombra”

Mendoza es considerado uno de los hombres más importantes en la historia de las Farc. Informes de inteligencia señalaron que era amigo personal de Manuel Marulanda Vélez o Tirofijo y uno de los jefes guerrilleros que más miedo infundían en la estructura guerrillera.

Tras conocerse la captura y posterior reclusión de Helí Mejía Mendoza, conocido en las filas de la otrora guerrilla de las Farc como Martin Sombra –quien ahora está implicado por su presunta participación en un secuestro– este lunes el partido político FARC ratificó su distancia con el exguerrillero y declaró que este “no tiene relación alguna” con la colectividad.

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A través de un comunicado divulgado por el Consejo Político Nacional de la FARC (Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común), que fue replicado por el jefe del partido, Rodrigo Londoño, el movimiento político recuerda que Mejía Mendoza fue desertor de las extintas Farc-EP en 2007 y posteriormente, fue capturado en 2008.

“(Martin Sombra) estuvo en la cárcel hasta 2017 tras pagar una condena que le impuso la Ley de Justicia y Paz. Por tales razones, no está en proceso de reincorporación producto del Acuerdo Final de Paz, no desarrolla proyectos productivos vinculados a la implementación y tampoco es integrante del partido FARC”, señalan.

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El exsubversivo –considerado uno de los máximos responsables de los secuestros de las Farc y quien era conocido en la guerra como El Carcelero, debido a que custodió en cautiverio a decenas de políticos, policías y soldados– es sindicado de supuestamente participar en el secuestro de un ganadero en San Vicente del Caguán, hecho que se habría perpetrado el 31 de diciembre de 2017.

Para la jueza del caso, existen elementos suficientes para tener la inferencia razonable de que fue Mejía Mendoza uno de los partícipes en la retención ilegal de Samuel Estupiñán. El secuestro ocurrió en la vereda Campohermoso, cuando a la propiedad de Estupiñán llegaron varios hombres, vestidos como funcionarios de la Fiscalía. Sin embargo, los hombres le robaron $300 millones al ganadero y después se lo llevaron. Desde entonces, sus seres queridos no saben de su paradero.

Los familiares realizaron la respectiva denuncia ante las autoridades, lo que llevó al Gaula a intervenir. Entre las pesquisas, se identificó unos números de celular que enviaban mensajes de WhatsApp a los familiares de Estupiñán para exigirles $800 millones por la liberación del plagiado. Tras la intervención de estas líneas, las autoridades establecieron como los principales sospechosos del secuestro a dos exguerrilleros de las Farc: Hernando Buitrago Martha, alias Kafir o Julián, y Helí Mejía Mendoza, más conocido como Martín Sombra.

Para las autoridades, las dudas frente a la autoría del secuestro se despejaron en el momento que un emisario de la familia Estupiñán aceptó reunirse con uno de los secuestradores. En este encuentro, en el que no se pudo lograr la liberación de su padre, lograron identificar a Martín Sombra como el interlocutor que les estaba exigiendo la millonaria suma. Asimismo, pudieron establecer que detrás del plan estaba Kafir.