Liberales se definen con miras al 2022: este sábado es su convención

Todo apunta a que el expresidente César Gaviria será elegido director de nuevo. / Partido Liberal

Este sábado, el Partido Liberal llega a su convención bienal con una sola certeza y varias incógnitas sobre su futuro. Lo cierto es que el expresidente César Gaviria renovará su mandato en la colectividad y nuevamente será director del partido por dos años más. Aunque falta la votación, los apoyos y los directorios de los rojos indican que su reelección es más que segura. Por otro lado, las dudas vienen del rumbo que tomarán frente al Gobierno, la ruta a seguir para las elecciones al 2022 e incluso está en el aire el futuro ideológico: se sigue en la línea de los avales o se recupera una línea ideológica. Todo este panorama viene aderezado con la situación de la pandemia que vive el país.

Al igual que el Congreso, la convención liberal tendrá que llevarse a cabo de forma remota, a través de plataformas de videollamada, debido a la imposibilidad de convocar de forma presencial ante el peligro de contagio que conlleva el coronavirus. La idea de la virtualidad no ha gustado en varios de los miembros del Partido Liberal, que ya han sufrido los rigores de estas plataformas en la labor legislativa. Uno de los que ha mostrado sus reparos es el senador Luis Fernando Velasco, quien señaló que “en la virtualidad es muy difícil hacer los debates de fondo que necesita el partido”. Su propuesta es cumplir con el requisito de la convención que exige la ley, para luego convocar a una extraordinaria, pero presencial.

La intención de Velasco es que en esa convención extraordinaria se den los debates que por muchos años se han venido aplazando en el liberalismo. Y es que, más allá de la seguridad de que Gaviria sea elegido este sábado, en el partido se comienzan a escuchar voces que piden un cambio en el rumbo que la colectividad ha tomado en los últimos años. Actualmente, entre las múltiples vertientes del liberalismo, se pueden identificar tres tendencias: las que brindan su apoyo irrestricto al expresidente Gaviria como director único; los que están de acuerdo con que sea elegido provisionalmente, mientras la pandemia, para luego dar paso a nuevos liderazgos; y los que piden su salida.

En esta primera línea está un amplio sector de los congresistas. Según algunas cuentas, treinta de los 35 representantes que están en la Cámara son de la línea gavirista. Uno de ellos, que pidió reservar su nombre, se refirió al exmandatario y aseguró que su reelección es más que segura, pero, no solo por este período, sino por cuantos períodos disponga. Este sector señala que Gaviria estará en la dirección hasta que decida retirarse de la vida política. El expresidente, quien gobernó entre 1990-1994, no solo cuenta con el apoyo de estos legisladores, sino que gran parte de los directorios regionales escogidos hace unos meses son también afines.

Varios senadores dicen que la elección de estos directorios se manejó “sin ninguna divulgación” y que eso habría sido diseñado por miembros de la línea gavirista para garantizar que a la convención solo llegaran afines al exmandatario. “Quieren tener el control del partido para las próximas elecciones y definir los avales y las presidenciales”, señaló un congresista, que pidió reservar su identidad. Velasco también asegura que “los directorios se eligieron muy escondidos”. Incluso contó que le mandaron una carta en la que le decían que se aplazaba el proceso y que el día anterior a la elección de estos, se enteraron de que la justa electoral seguía en pie. El representante Juan Carlos Losada reconoció poca participación en los directorios, pero dijo que es culpa del actual estatuto del partido.

Precisamente, Losada está en el segundo grupo de liberales, los que consideran que el actual director debe seguir hasta que pase la pandemia. “Es obvio que Gaviria ganará, porque no hay quién le haga pulso. Pero que el expresidente se reelija con miras de renovación”, aseguró el representante bogotano, que luego añadió: “Creo que el Partido Liberal necesita una renovación. Los jóvenes de la Cámara hemos estado invisibilizados”. La fórmula que proponen es que César Gaviria salga elegido en la convención de este sábado, pero que su mandato tenga como fin último darles paso a nuevas voces. En esta línea también se puede apuntar Velasco, quien ha sido uno de los más críticos en el último tiempo frente al liderazgo ejercido por el expresidente.

A través de una carta, el senador invitó a Gaviria a que sea “el hombre de la transición liberal” y “pavimente el camino para la llegada de liderazgos que refresquen el partido”. En esta dirección, el senador propuso en diálogo con este diario que “lo del sábado sirva para mantener la personería y planear un congreso presencial que sea de la transición”. Según Velasco, Gaviria le habría confesado que no tendría ningún interés en seguir en la dirección por mucho tiempo. Por eso su petición reside en que este siga mientras la pandemia y luego se haga una convención presencial en la que se elija un nuevo director o directores, si se decide por una dirección colegiada, y se defina la ruta para 2022.

“Quiero al Gaviria de ‘bienvenidos al futuro’ y la tutela. Quiero al demócrata. Gaviria no necesita ser jefe del partido para que lo escuchen”, comentó Velasco, quien señaló que debe determinarse si el partido buscará a los líderes de derecha, como lo ha venido haciendo, o si recuperará el centro para perder el miedo a hacer nuevas propuestas como una alternativa a la Ley 100 de la salud y otras iniciativas fuertes a favor del pueblo. En este Congreso también se discutiría el actuar para las presidenciales de 2022. Por un lado, está un sector de los reconocidos gaviristas, que intentaría acercarse a la casa Char, mientras que otro bando, en el que está Velasco, propone llegar con un candidato propio de línea liberal y que este se presente a una coalición con otros sectores afines de centro y de izquierda.

En la tercera línea están los que piden una salida pronta de Gaviria y que se abra el debate. Parte de este sector, que pidió el anonimato, asegura que le solicitaron a Gaviria “que se aplace la convención y que se haga una cosa amplia”. Uno de los senadores de esta línea señaló que se podría pedir al CNE que otorgue esta prórroga por la contingencia. Las críticas contra el exmandatario son duras y señalan que el partido se ha desdibujado por privilegiar solo la línea gavirista. Ese cierre habría hecho que referentes como Juan Fernando Cristo, Iván Marulanda y otros hayan enfilado caminos hacia otros sectores, ante la pérdida del sustento ideológicodel partido del trapo rojo.

En este punto también hay una crítica en cuanto a quién estaría ejerciendo realmente el poder en la colectividad. Supuestamente Simón Gaviria sería el poder detrás del trono de su padre. “Simón es el que está manejando, es el jefe, pero no visible”, contó uno de los senadores liberales que se oponen a la continuidad de Gaviria. En este punto hay divergencia de posiciones. Un representante que apoya la transición señaló que no es cierto que Simón Gaviria esté ejerciendo un gran poder en el partido. Incluso, tras su regreso de sus estudios, ha visto su influencia disminuida. Esto se vería reflejado en dos grandes derrotas: la reforma tributaria del 2019 y la elección de defensor. Según este liberal, la posición del delfín fue vencida en esas dos ocasiones.

En medio de la pandemia, el partido se juega su futuro. La convención de hoy promete ser bisagra frente al proceder de la colectividad en los próximos años. No solo se definirá la continuidad del expresidente Gaviria como director del partido, sino la ruta a seguir, por lo menos, hasta 2022. Cercanos a la colectividad roja aseguraron que el exmandatario tiene preparado un discurso de sesenta páginas para despacharse en contra del presidente Iván Duque. Si esto es cierto, el partido se perfilaría para tratar de llegar a las próximas elecciones lejos del Ejecutivo y con sus fichas propias.