Este lunes, el expresidente Andrés Pastrana le envió una carta a la presidenta de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), Patricia Linares, solicitando cuatro puntos, con base en acuerdos internacionales suscritos por Colombia con la Corte Penal Internacional, para responsabilizar a la extinta guerrilla de las Farc sobre los crímenes ocurridos en el marco de la guerra.
Desde el comienzo de la misiva, Pastrana pone de precedente que, como la creación del tribunal transicional fue algo excepcional, su existencia y operación es discutible. Esto, explicó, con origen en el plebiscito de paz de 2016, el triunfo del no y la “generosa tolerancia de la ciudadanía tras desestimar un plebiscito adverso, por medios ajenos a nuestras leyes y la Constitución”.
Lea: “Si encuentran que no dimos la verdad, asumimos lo que diga la magistratura”: Timochenko.
De esto modo, antes de entrar a exponer sus solicitudes, el expresidente recuerda los principios de comparecencia de verdad, justicia, reparación y no repetición y que, a su juicio, los líderes de la FARC “han burlado plena y descaradamente”, poniendo como ejemplo el rearme de “Iván Márquez” y de “Jesús Santrich” y otros disidentes de la guerrilla. “(Esto es una) prueba irrefutable de que la condición de no repetición pactada se violó”, enfatizó el exmandatario.
Otro punto que dice que la guerrilla ha faltado es el referente a la verdad. “El falso testimonio en el que los antiguos jefes de las Farc niegan muchos de sus crímenes, en abierto desafío al país y la justicia, es una plena contradicción con lo que la Sala de Reconocimiento de Verdad de la JEP reconoce”.
Y en ese sentido, sobre las tantas intervenciones de los líderes del ahora partido político en medios de comunicación, donde, en principio, había una negación y luego un reconocimiento, Pastrana expresó, específicamente sobre la reciente carta pública de la FARC: “La admisión de responsabilidad por fuera de la instancia de la JEP, como lo pretenden las Farc con misivas extra proceso, es una burla al tribunal y, de ser permitida, sería admisión por parte de sus magistrados de la subordinación de la JEP a los caprichos de las Farc y de la invalidez de lo firmado”.
En la misiva referida, Rodrigo Londoño, más conocido en la guerra como Timochenko, aceptó los crímenes ocurridos, pero como líder de la guerrilla no estuvo enterado de estos, según sus testimonios. En esa línea, Pastrana le pidió a la JEP no deja de lado los tratados internacionales con la Corte Penal Internacional en los que “los máximos responsables militares de las Farc son individualmente responsables por los actos cometidos por las fuerzas bajo su mando que ellos ‘hubieren debido saber’ o ‘en razón de no haber ejercido un control apropiado sobre ellas’”.
Lea: “Les arrebatamos lo más preciado: su libertad y dignidad”: Farc a víctimas de secuestro.
Bajo ese recuento, las peticiones de Pastrana a la JEP son iniciar el proceso de exclusión del tribunal de los líderes de las Farc que no hayan aportado toda la verdad; que se aplique el principio de la Corte Penal Internacional sobre la responsabilidad de los máximos jefes de la otrora guerrilla; que se informe cuándo se publicarán las conclusiones de los casos abiertos y de las acciones que tome por razón de la carta.
“La ausencia o la imposibilidad de comprobar una orden explícita de la cúpula para cometer atrocidades no exime a los altos jerarcas de la subversión de su responsabilidad penal individual”, advierte como conclusión el expresidente.