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“¡Oh gloria inmarcesible!, ¡Oh júbilo inmortal!”, la mayoría de colombianos, por no decir todos, saben que así comienza el himno nacional. Sin embargo, son pocos los que lo han llegado a entonar a totalidad. Son 11 estrofas, y cada una viene seguida de la entonación de ese coro inconfundible. De llegar a cantarse en toda su extensión, ceremonias, izadas de bandera y otros eventos serían mucho más extensos de lo que ya son.
La canción patria fue compuesta por Rafael Núñez y musicalizada por el italiano Oreste Síndici para un propósito completamente diferente al que hoy es usada. La extensa letra era una oda en celebración a la independencia de Cartagena y no se pensaba que sería una de las máximas representaciones de la nación colombiana. Sin embargo, la composición se popularizó a tal grado que reemplazó a otros intentos de himno y desde 1887 comenzó a entonarse como el cántico nacional colombiano, aunque solo tomó carácter oficial en la ley 33 de 1920.
Con el pasar del tiempo, se simplificó su entonación en eventos oficiales y se limitó a que se cante su coro, la primera estrofa y nuevamente su coro, dejando a un lado las otras 11 estrofas. Sin embargo, al Congreso acaba de aterrizar un proyecto de ley que busca cambiar la costumbre actual y volver a retomar algunas de las porciones olvidadas del himno. La iniciativa busca que de ahora en adelante en los eventos oficiales se tenga que “interpretar o escuchar el coro y las primeras cuatro estrofas del himno nacional”.
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De llegarse a aprobar esta iniciativa, se recuperarían las estrofas que celebra la independencia de todo el continente americano(estrofa II); que recuerda la batalla de Bárbula (1813), en la que murió Atanasio Girardot (estrofa III); y conmemora el asedio de Cartagena por el ejército realista, comandado por Pablo Morillo (estrofa IV). Para los autores de la iniciativa, el senador José Luis Pérez y el representante Oswaldo Arcos -ambos de Cambio Radical-, la iniciativa es esencial para construir “una verdadera identidad nacional”.
“La nacionalidad colombiana es una decisión en nuestro territorio y un acto de fe en el extranjero. Escuchar las notas de nuestro himno nacional reconfortan el alma y el espíritu y nos hace evocar lo importante que es la identificación como colombianos”, fueron algunos de los argumentos expresados por los congresistas de Cambio Radical para justificar este proyecto.
En esta misma línea, los autores aseguraron que solo entonar el coro y la primera estrofa no le hace justicia “a la titánica obra musical e histórica” que implica el himno colombiano. “Colombia merece más y por eso proponemos que se entone el coro y las primeras cuatro estrofas”, concluyeron el senador y representante frente al texto que radicaron.
Por otro lado, el proyecto también pide que sea obligatorio que se entone el himno en toda ceremonia de carácter público que lleve a cabo “todas las ramas, órganos y entidades del poder público”. En este mismo orden de ideas, la iniciativa se extiende hasta los órganos colegiados (Senado de la República, Cámara de Representantes, Asambleas Departamentales, Concejos Municipales y Juntas Administradoras Locales). Por lo que al inicio de cada sesión se debería entonar la canción patria.
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Y es que, además de expresar la necesidad de escuchar el himno para crear identidad nacional, los autores se quejaron de lo poco que se interpreta la obra de Nuñez, sobre todo en el Legislativo. “Debemos comenzar en el Congreso que solo lo escucho cada año”, dice el texto que fue allegado a la Cámara.
No está claro cuál sea el futuro de esta iniciativa. Actualmente al Congreso llegaron varios temas de gran calado como la reforma a la salud y la controvertida, y muy criticada, reforma tributaria. Se espera que la mayoría de las discusiones de este semestre se inviertan en estos temas, por lo que posible que no haya tiempo para otros apartados aparentemente menores. Además, es ya conocido que, el año antes de elecciones legislativas, la labor del Congreso se ralentiza .
También, vale recordar que han recibido amplias críticas proyectos de naturaleza similar que han sido debatidos en el Congreso en el último tiempo. Es el caso de la iniciativa que busca consagrar al carriel como patrimonio de la nación. Durante su discusión en la Plenaria de la Cámara, varios representantes censuraron que se gastara el tiempo de las sesiones en discutir y tramitar dichos textos cuando el Legislativo debía enfocarse en los temas de la pandemia.
Otros intentos de cambiar el himno
Este proyecto se une al listado de varias iniciativas que intentaron cambiar el himno o sus prácticas al entonarlo. Una de ellas fue en 1997, cuando una demanda ante la Corte Constitucional buscaba modificar 10 de las 11 estrofas debido a que, supuestamente, eran una “apología a la violencia y la discriminación religiosa”. La demanda no prosperó y la canción nacional quedó intacta.
En otra ocasión, un proyecto de ley de 2008 buscaba que al entonar el himno, no solo se tuviera que poner de pie, sino que obligaba a poner la mano derecha en el pecho, a la altura del corazón. Curiosamente este gesto era el mismo que utilizaba el entonces presidente Álvaro Uribe en sus piezas de campaña y la iniciativa fue propuesta justo cuando el ahora líder de Centro Democrático gozaba de más popularidad.
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Otros intentos de meterle mano al himno pretendían cambiar algunas de sus estrofas para rendir honor a Francisco de Paula Santander y añadir una nueva porción para celebrar los acuerdos de paz con la extinta guerrilla de las Farc. Hasta el momento ninguno de estos intentos por cambiar algún elemento del himno han triunfado. ¿Será que el proyecto para recuperar tres estrofas del himno tendrá un futuro diferente?
Así quedaría la versión a interpretar del himno
Coro
Oh gloria inmarcesible
Oh júbilo inmortal
En surcos de dolores
El bien germina ya.
Primera estrofa.
Cesó la horrible noche
La libertad sublime
Derrama las auroras
De su invencible luz.
La humanidad entera,
Que entre cadenas gime,
Comprende las palabras
Del que murió en la cruz
Segunda estrofa.
“Independencia” grita
El mundo americano:
Se baña en sangre de héroes
La tierra de Colón.
Pero este gran principio: “el rey no es soberano”
Resuena, Y los que sufren
Bendicen su pasión.
Tercera estrofa.
Del Orinoco el cauce
Se colma de despojos,
De sangre y llanto un río Se mira allí correr.
En Bárbula no saben
Las almas ni los ojos
Si admiración o espanto
Sentir o padecer.
Cuarta estrofa.
A orillas del Caribe
Hambriento un pueblo lucha Horrores prefiriendo
A pérfida salud.
Oh, sí de Cartagena
La abnegación es mucha,
Y escombros de la muerte
desprecian su virtud.