'Sistema de regalías es un raponazo a la autonomía'

El gobernador del Meta, Alan Jara, habla de los cuellos de botella que tendría el nuevo modelo.

Natalia Herrera Durán
16 de enero de 2013 - 03:27 p. m.
Alan Jara, gobernador del Meta.
Alan Jara, gobernador del Meta.

En los corredores del foro que realizó hoy el Ministerio del Interior con los gobernadores del país para hablar de las propuestas agrarias que llevarán las regiones a La Habana, los mandatarios locales aprovecharon para discutir sobre una  vieja incomodidad: el nuevo sistema de regalías. La pérdida de recursos y de autonomía son sus principales quejas, ahora que esperan que el Gobierno entienda que las políticas se llevan a los territorios con recursos más que con discursos.

Tras una reunión en Casa de Nariño, el Ejecutivo aseguró que los dirigentes de los departamentos tienen garantizado el 60 por ciento de estos dineros. A pesar de eso, la molestia es evidente. El gobernador del Meta, Alan Jara, quien ha criticado fuertemente el sistema, habló con El Espectador sobre el atraso que se ha generado.

¿Cómo ve el nuevo sistema de regalías?

El principal trauma se generó cuando se desmontó el sistema anterior sin tener listo el nuevo sistema. No se creó un régimen de transición y eso generó una parálisis en regalías durante todo el año 2012.


¿Esto pasó por falta de entendimiento del sistema?

No, nosotros fuimos los más aplicados en los Órganos Colegiados de Administración y Decisión (Ocad), hicimos bien la tarea, presentamos los proyectos con toda la tramitología, nos aprobaron los proyectos que presentamos, se comprometieron la totalidad de los recursos y aun así solo a final de año se pudo programar la inversión, porque después de aprobado un proyecto, de asignado unos recursos viene todo el proceso licitatorio…

¿Una lentitud absurda?

Sí, prácticamente perdimos un año. Yo dije que nos habían recortado el periodo.

¿Qué esperan ahora, cuando los recursos no sólo no se desembolsan sino se han reducido?

Como región productora, por ejemplo, no alcanzamos a poner al día al departamento en infraestructura. Lo que esperamos, y así lo ha entendido el Presidente, es una compensación en inversión frente a la pérdida de recursos para nuestra entidad territorial.

¿A qué acuerdos llegaron con respecto al veto con el presidente Santos?

El Presidente nos ha dicho muy claramente que él no va hacer uso del veto que aprobó el Congreso, salvo en temas muy excepcionales.

¿La crítica sigue siendo la centralización?

Sí, porque el nuevo modelo termina centralizando las decisiones y algo muy delicado es que acaba con el voto programático.

¿En qué sentido?

En que ahora no es el programa de gobierno, el que usted inscribió en la Registraduría, por el que la gente votó, lo que se llevó a un Plan de Desarrollo, sino lo que apruebe el Ocad. Ayer le expresamos eso al Presidente y nos ha dicho que impartirá instrucciones a los ministros y a las personas que van a los Ocad para que se priorice el tema del Plan de Desarrollo de los departamentos.

¿Siente que así como están las cosas les termina mintiendo a las personas que lo eligieron?

Claro, porque cuando formulamos ese Plan de Desarrollo se contaban con unos recursos y con un sistema que permitía asignar esos recursos a esas iniciativas. Hoy en día ya no depende de esto, depende de que el Ocad lo apruebe o no. Frente al raponazo de los recursos lo que se ve con la aprobación de esta ley es el raponazo a la autonomía.

¿Cree que el nuevo sistema de regalías ha deteriorado la relación entre el Gobierno y los mandatarios regionales?

No diría que en el caso particular del Meta se han deteriorado, diría incluso que han mejorado porque hay mucho diálogo, en ese sentido no tengo queja.

¿En dónde sí la tiene?

Es en el marco conceptual, porque el nuevo sistema es el de un Estado que toma unos recursos que son de las regiones y pone un nivel de decisión en el nivel central.

¿No está de acuerdo con el Gobierno en que los recursos de regalías vayan para todos los departamentos?

Sí, pero esa equidad tiene que ser en todos los recursos, no solamente en el tema de regalías. Regalías son nueve millones, pero el presupuesto de la Nación son 186 billones. Esa otra mermelada también la estamos esperando en las regiones.

Por Natalia Herrera Durán

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