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Dejusticia y el Centro de Pensamiento de Medicamentos, Información y Poder de la Universidad Nacional hicieron este martes una petición pública al presidente, Iván Duque, para que apoye la suspensión temporal de propiedad intelectual sobre las vacunas contra el coronavirus.
La motivación, aseguran, es que es indispensable aumentar la disponibilidad de las dosis a través de una capacidad de producción más amplia, que no dependa solo de las farmacéuticas. (Le recomendamos: Una ‘revolucionaria’ propuesta para que el planeta acceda a una vacuna para el COVID-19)
“La pandemia por COVID-19 está ocasionando un terrible sufrimiento en Colombia y en el mundo, pero lo que es aún más doloroso y éticamente inaceptable es que gran parte de ese sufrimiento sea evitable”, expresan en un comunicado. A lo que se refieren es a que, aunque en el último año se han logrado avances científicos en tiempo récord para tratar el coronavirus, en especial, varias vacunas que han probado ser seguras y efectivas, “aún no se están produciendo las suficientes para inmunizar en poco tiempo a la población mundial, y la mayoría han sido aplicadas en países desarrollados”.
Según indican las investigadoras y científicas, lo anterior es éticamente inaceptable, pues actualmente existe la capacidad técnica para incrementar la producción mundial de vacunas. ¿Cómo? Si las farmacéuticas que desarrollaron las vacunas hicieran pública la información completa (incluidos secretos industriales) y, mediante licencias abiertas, transfirieran su conocimiento para permitir a otras compañías o instituciones producirlas. Pero esto no está sucediendo. (Le puede interesar: Vacuna para el COVID-19: una promesa a medio camino)
De hecho, gobiernos de Sudáfrica e India lanzaron una petición para que la Organización Mundial del Comercio apruebe una suspensión temporal de ciertos aspectos de la propiedad intelectual sobre las vacunas, tratamientos y otras tecnologías en salud contra el COVID-19, al menos, hasta que la pandemia sea controlada. Esta petición ya ha sido respaldada por más de 100 países, instituciones académicas y humanitarias, instituciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud, la Alta Comisionada de Derechos Humanos, y varios relatores especializados de Naciones Unidas. Sin embargo, hasta ahora, Colombia no ha apoyado esta moción.
Por eso, mediante un derecho de petición, Dejusticia y el Centro de Pensamiento Medicamentos, Información y Poder le pidieron a presidente Iván Duque, apoyar la petición realizada por India y Sudáfrica, “y de no hacerlo, que explique sus razones”.
Junto al @CPMedicamentos enviamos un derecho de petición al mandatario en el que le recordamos que para producir las vacunas que necesitamos, la información de las mismas debe ser pública. https://t.co/wScpGpXDgc
— Dejusticia (@Dejusticia) May 4, 2021
“En el mundo existen muchas compañías y numerosos países, como Corea del Sur, India, Brasil, México o Argentina, que podrían aumentar en poco tiempo la producción global de vacunas para llegar a las dosis requeridas, y la distribución sería más equitativa, pues se superaría la limitación de la oferta y no habría la actual competencia entre los países por lograr acuerdos poco transparentes con las farmacéuticas”, insisten las investigadoras, que también invitan a todas las personas a firmar la petición web en la plataforma Change.org.
El derecho de petición dirigido al presidente, y con copia a ministro de Salud Fernando Ruiz, está firmado por Vivian Newman, Directora del Centro de Estudios Derecho, Justicia y Sociedad “Dejusticia”; Claudia Patricia Vaca González, Directora del Centro de Pensamiento “Medicamentos, Información y Poder” de la Universidad Nacional, y Rodrigo Uprimny Investigador de Dejusticia.