¿Cumplirá la humanidad los Objetivos del Milenio en salud?

En septiembre de 2000, en la ciudad de Nueva York, 189 países firmaron una declaración en la que se comprometieron a cumplir una serie de metas con el propósito de mejorar los índices de desarrollo en el mundo. En la Declaración del Milenio, como fue llamado ese documento, aquellos estados se trazaban un plazo de 15 años para, entre otras cosas, erradicar la pobreza extrema, lograr enseñanza primaria universal, reducir la mortalidad infantil y combatir el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Hoy ese término se ha cumplido y todo indica que esas metas no se podrán superar.

Al menos eso es lo que refleja el informe que acaba de publicar la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el que analiza los datos de los 194 países. Según el organismo, si bien es cierto que se han hecho avances alentadores aún hay brechas enormes entre las naciones. 

Por ejemplo, el quinto objetivo, referente al mejoramiento de la salud materna, se ha cumplido a medias. Aunque es cierto que el número de mujeres que fallecía debido a complicaciones en el embarazo y en el parto se ha reducido a la mitad entre 1990 y 2013, esa tasa no será suficiente para lograr una disminución del 75% que era lo que se tenía previsto. 

Además, tal y como lo refleja el documento de la OMS, en África  una de cada cuatro mujeres que quiere prevenir el embarazo no tiene acceso a anticonceptivos, y solo una de cada dos da a luz con la colaboración de una partera especializada. 

“Menos de dos tercios de las mujeres en todo el mundo (64%), reciben las cuatro visitas de atención prenatal necesarias durante el embarazo”, se lee en el texto.

Algo similar sucede con el acceso a agua potable. La meta mundial, en términos relativos, se cumplió en 2010 pero el continente africano y algunos países del este del Mediterráneo están muy lejos de poder alcanzarla. También, en términos de saneamiento básico, hay inmensas dificultades: mil millones de personas se ven obligadas a defecar en espacios abiertos y por la falta de instalaciones hay un riesgo mucho mayor de contraer enfermedades diarreicas, cólera hepatitis. 

“Los Objetivos del Milenio han sido muy buenos para la salud pública –aseguró Margaret Chan, directora de la OMS a través de un comunicado-. El informe de hoy pone en evidencia la necesidad de mantener los esfuerzos para garantizar que los más vulnerables del mundo tengan acceso a los servicios de salud”.

Chan tiene razón. Hay una clara urgencia de que en los próximos años se sumen muchos más esfuerzos para cumplir con esas metas que serán evaluadas en septiembre próximo en Nueva York. Una buena muestra son los registros de mortalidad infantil. Pese que para este 2015 se esperaba  que se redujeran en dos tercios en comparación a 1990, cuando había 90 fallecimientos por cada mil nacidos vivos, solo fue posible disminuirlos a la mitad. Parto prematuro, neumonía, asfixia al nacer y diarrea siguen siendo algunas de las principales causas de muertes en menores de cinco años. 

Respecto al VIH, la OMS asegura que es poco probable que se logre un tratamiento universal a los antirretrovirales. Sin embargo, es posible que a finales de este año 15 millones de personas que viven en países de bajos y medianos ingresos, tengan acceso a los medicamentos. Además, el número de nuevas infecciones se ha reducido notablemente: frente a los 3,4 millones que se reportaron en 2001, en 2013 se registraron 2,1 millones.