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Las tres primeras causas de muertes prematuras entre los colombianos, según el Estudio Anual de Carga Mundial de Enfermedades, siguen siendo las mismas comparadas con el 2005: violencia interpersonal, infartos y accidentes de tránsito. Donde si se detectó un cambio significativo fue en el cuarto lugar de ese listado pues las enfermedades cerebrovasculares se treparon del séptimo al cuarto puesto.
El Estudio Anual de Carga Mundial de Enfermedades es la colaboración científica más grande del mundo para cuantificar la pérdida de la salud. Se basa en el trabajo de más de 2.500 colaboradores de más de 130 países y territorios. Estudia 264 causas de enfermedad para mostrar tendencias sobre la enfermedad, los fallecimientos y los factores de riesgo que conducen a una salud deficiente.
El reporte que acaba de ser publicado a través de la revista The Lancet revela que en la última década los países han estado salvando más vidas, especialmente entre los niños menores de cinco años, pero persisten graves problemas relacinados con la obesidad, el conflicto y la enfermedad mental.
“Tanto para las personas como para los países, la muerte es un motivador importante para abordar las enfermedades que nos han estado quitando la vida a tasas elevadas”, comentó a través de un comunicado Christopher Murray, Director del Instituto de Evaluación y Métrica de Salud (IHME, por sus siglas en inglés) de la Universidad de Washington. “Una ‘tríada de problemas’ – la obesidad, el conflicto y las enfermedades mentales, lo que incluye los trastornos por uso de sustancias – dan lugar a una tenaz y persistente barrera en contra de estilos de vida activos y vigorosos.”
Una buena noticia es que las infecciones de las vías respiratorias inferiores, la diarrea, el parto prematuro, el VIH/SIDA y la malaria, se han reducido un 30% o más en tan sólo una década. En el 2016, por primera vez en la historia moderna, menos de 5 millones de niños menores de 5 años fallecieron en un año, a comparación con los 11 millones que fallecieron en 1990.
Los investigadores atribuyen este punto de referencia mundial de la salud a las mejoras en el aumento de los niveles educativos para las madres, el aumento de los ingresos per cápita, la disminución de los niveles de fertilidad, el crecimiento de los programas para vacunación, la distribución de redes para cama tratadas con insecticida, la mejora del agua potable y saneamiento, y una amplia gama de otros programas de salud financiados por los fondos de desarrollo para la salud.
El nuevo reporte es un llamado de atención para las autoridades de salud en torno a un problema que sigue creciendo sin control: el exceso de peso corporal. “La tasa de enfermedad relacionada con las personas con exceso de peso está creciendo rápidamente, y la carga de la enfermedad puede encontrarse en todos los niveles sociodemográficos. El índice de masa corporal (IMC) alto es el cuarto mayor contribuyente a la pérdida de la vida sana, siguiendo a la presión arterial alta, el tabaquismo y la hiperglicemia”, anunciaron los autores.
Otra aspecto que genera preocupación es que durante la última década se duplicaron los fallecimientos por conflictos y terrorismo.
Los autores del trabajo también piden poner más atención a las enfermedades mentales y el uso de sustancias psicoactivas. Las tasas de tratamiento para trastornos mentales y de uso de sustancias aún son bajas. La prevalencia de los trastornos más comunes no ha cambiado, incluso en aquellos países de ingresos altos donde la cobertura para el tratamiento ha aumentado.
Otros hallazgos del estudio:
La mala alimentación estuvo asociada con casi uno de cada cinco fallecimientos a nivel mundial.
Las enfermedades no transmisibles fueron responsables del 72% de todos los fallecimientos en todo el mundo en el 2016, a comparación de 58% en 1990.
En la última década, la diabetes subió del puesto 17 al 9 como causa principal de muerte en los países de ingresos bajos a medianos.
El tabaco estuvo asociado con 7,1 millones de fallecimientos y el tabaquismo fue uno de los principales factores de riesgo para la pérdida de la vida sana en más de 100 países.
Las principales causas de la carga de la enfermedad a nivel mundial incluyeron: cardiopatía isquémica, enfermedad cerebrovascular, infecciones de las vías respiratorias inferiores, dolor de espalda y cuello, enfermedades relacionadas con la diarrea y lesiones sufridas en rutas
Entre los países con más de 1 millón de habitantes, la expectativa de vida más alta al nacer en el 2016 fue en Japón para las mujeres (86,9 años) y en Singapur para los hombres (81,3 años).