Omitir un medicamento, entre los errores más frecuentes al recibir un tratamiento de salud

Fallas en la prescripción, dispensación y administración suelen figurar entre las principales causas para que los pacientes registren un efecto contrario al esperado, así lo concluyó un estudio realizado por el Centro de Información de Medicamentos (Cimun), de la Universidad Nacional.

Agencia de Noticias de la Universidad Nacional - Unimedios
20 de noviembre de 2018 - 11:00 p. m.
Prensa Universidad Nacional
Prensa Universidad Nacional

Así lo estableció un estudio realizado a lo largo de un año en un hospital de Bogotá, el cual evidenció que entre los errores de medicación más frecuentes se encuentra la omisión de una o más dosis del medicamento.  La investigación se hizo sobre 1.400 reportes, de los cuales se evaluaron 186, y se evidenció que el 40 % obedecía a los errores mencionados. (Lea: Abren primeras tiendas de marihuana en la costa este de EEUU)

“Nuestro trabajo consistió en evaluar los reportes que llegaban a la base de datos de una institución de alto nivel de complejidad, con énfasis en aquellos eventos directamente relacionados con medicamentos”, explica el profesor José Julián López, director del Centro de Información de Medicamentos (Cimun), de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.).

Aunque un 10,5 % de los reportes mostraba que el medicamento no había funcionado, en especial para el caso de anestésicos y antihipertensivos, el estudio evidenció que también se presentaban situaciones en las que se omitían dosis.

Falta personal especializado

Según explica el docente, este tipo de error está directamente relacionado con el hecho de que, en líneas generales, los hospitales carecen del personal suficiente, especialmente de aquel especializado en Química Farmacéutica, lo que se hace más notorio durante los fines de semana y en horas de la noche.

“Cuando la farmacia del hospital queda a cargo de personal auxiliar, el acceso a algunos medicamentos es restringido, lo que hace que si se presenta un evento, es muy factible que no lleguen a ser entregados”, explica el docente.

Otros factores se relacionan con la falta de personal médico y paramédico. En el caso del hospital donde se llevó a cabo el estudio, aunque se cuenta con un infectólogo, este solo va una vez a la semana.

De otra parte, cálculos no oficiales estiman que un 50 % de las personas que laboran en el sector salud en Colombia tienen un empleo adicional, lo que hace que muchos de ellos acumulen grandes cargas de estrés laboral.

Esta situación se refleja en la imposibilidad de que el personal hospitalario cumpla adecuadamente sus funciones, además de la excesiva rotación, por cuanto se trata de contratos de prestación de servicios a término fijo.

Tales deficiencias hacen que el personal no se conozca entre sí, por lo que también es usual una evidente falta de comunicación, lo que genera un caldo de cultivo para que se produzcan errores.

Medicamentos inadecuados

Entre las posibles causas para que un medicamento no funcione en forma adecuada también se debe considerar que este no sea el más indicado, que la dosis resulte insuficiente, o que otras enfermedades dificulten la posibilidad de evaluar los avances.

No obstante, llama la atención que los reportes de este apartado se centraron en tres medicamentos: Midazolam, un sedante para inducir la anestesia; Labetalol, para tratar la hipertensión arterial, y Fentanilo, para el dolor.

“Aunque se suele argumentar que las fallas obedecen a que se trata de medicamentos genéricos, cuando se hizo el análisis y la evaluación de causalidad, en ninguno de los casos se evidenció que esta fuera una razón válida”, precisa el director del Cimun.

Otro aspecto que se presenta en el 30 % de los casos reportados es la reacción adversa al medicamento, entre las que destaca la flebitis o inflamación de la vena en el sitio donde se coloca el catéter para administrar el medicamento, con particular énfasis en el uso de antibióticos.

A juicio del profesor López la causa podría ser consecuencia de un uso inadecuado del medicamento, aunque también se constató que errores en el suministro podían asociarse con esta anomalía.

Aunque el sistema de salud está montado sobre un modelo de negocio que debe ser eficiente y generar ganancias, aspectos como la seguridad del paciente también deberían llamar la atención de quienes están a cargo de su administración, puesto que en muchas ocasiones el personal auxiliar termina haciéndose cargo de labores que deberían ser realizadas por especialistas en el campo farmacéutico.

Por Agencia de Noticias de la Universidad Nacional - Unimedios

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar