El iPhone 6S llegó a Colombia pisando fuerte. Sin embargo, en esta oportunidad lo que se robó la atención del público no fueron los avances tecnológicos de Apple, sino sus elevados precios. La versión más barata del nuevo celular cuesta $2’862.000, incluyendo el IVA, y la unidad más cara puede llegar hasta $4’100.000. Si bien el valor de venta de los productos de la empresa de la manzanita suelen ser altos, el encarecimiento de más de 60% que ha tenido la cotización del dólar en el país ha agudizado la situación.
Pero el elevado precio del iPhone no es sólo difícil de costear en Colombia. En Estados Unidos se experimenta el mismo problema. La gran diferencia entre un país y otro son los planes que ofrecen los operadores. Mientras en el mercado local las grandes marcas ofrecen opciones de financiamiento para comprar los celulares vía préstamos, en EE.UU. existe la opción de inscribirse a un plan de actualización o de alquiler de celular sin necesidad de endeudarse.
Estas son opciones que los operadores de telefonía móvil de Estados Unidos brindan con el fin de que los consumidores puedan cambiar de celular al ritmo de los lanzamientos de Apple y de otras marcas, que suelen ser anuales. El trato consiste en que los clientes pagan una mensualidad a cambio del nuevo dispositivo, y después de cierto tiempo se abre la opción de renovar el celular por una versión más moderna. Por ejemplo, Verizon cobra una cuota de US$31 ($90.000) a cambio del iPhone 6s Plus, y después de seis meses permite hacer una actualización.
Y la cosa no termina ahí. Firmas como Sprint ofrecen la opción a sus clientes de recibir versiones anteriores como parte de pago y cobran una cuota mensual mucho menor, sólo que se mantiene por más tiempo. De esta manera, la compañía recibe un iPhone 6 Plus a cambio de un iPhone 6s Plus, y exige por dos años una cuota mensual de US$5 ($15.000). Una alternativa viable para aquellos a quienes no les importa esperar un poco más para cambiar de celular.
La historia es diferente en Colombia, pues no existe el programa de actualización ni de alquiler y los operadores sólo brindan un mecanismo de financiamiento vía préstamos. Movistar y Claro ofrecen pagar el iPhone 6s a 24 cuotas mensuales y sin intereses, en pagos de $126.800 y $102.751, respectivamente. Por su parte, Tigo también permite pagar el celular en dos años, pero cobra una tasa de interés con respecto al perfil crediticio de cada persona, en promedio 2% mensual.
Movistar y Claro indicaron que el consumidor es libre de renovar su celular cada año, sólo que, además de actualizar los celulares, también se renueva el crédito: los clientes que van en el mes 12 de su plan de financiamiento tienen la opción de cambiar su celular por el nuevo iPhone 6s, sólo que deberían empezar de cero en cuanto al pago de su smartphone. De manera que, aunque en el sistema local también se permite renovar el iPhone cada año, la diferencia con el modelo estadounidense es que allí el consumidor jamás se endeuda.
Los tres operadores colombianos también aceptan los celulares como forma de pago. El valor monetario en el que se traduce el smartphone depende del modelo y la marca. Por ejemplo, Tigo paga máximo $1’000.000 por un dispositivo. Además, las cuotas mensuales no cambian de monto.
Andrés Carlesimo, director de producto de Claro, explica que “este modelo es ineficiente en Colombia. Muchos de los clientes prefieren vender sus celulares en otros lugares, pues se los compran a mejor precio. Nosotros sólo servimos como intermediarios entre los clientes y las compañías que compran y venden celulares usados”.
Carlesimo también señala que “la diferencia de los programas de financiamiento entre ambas naciones radica en que en Estados Unidos hay cláusulas de permanencia y en Colombia se eliminaron a mediados de 2014, por lo que a los operadores del primer país les queda más fácil brindar este tipo de promociones. Por esto, en caso de que al mercado local vuelvan este tipo de contratos, se podría brindar mejores planes al consumidor colombiano”.
Para el vicepresidente de la unidad móvil de Tigo Une, Marcelo Cataldo, “la coyuntura económica en la que vive Colombia, por el tema del dólar, amerita buscar una alternativa intermedia entre las cláusulas de permanencia y la liberación de estas. Si se logra un equilibrio, se podrá mejorar los planes de los celulares, y eso ayudará que a los consumidores puedan acceder a este tipo de artículos”.