Censura que enferma

Por: Carolina Piñeros Ospina*

Los estudiantes (13-17 años) tienen pésimos hábitos alimenticios, uno de los más graves: 3 de cada 4 consumen más de 1 bebida azucaradas al día (ENSE 2018). Además, entre el 2010 y el 2015 el 30% de niños entre 5 y 12 años pasó a incrementar las cifras de exceso de peso, ya 1 de cada 4 niños lo padece (ENSIN 2015). El problema NO es estético, el exceso de peso en la infancia encamina hacia problemas de salud, como la diabetes tipo 2 y enfermedades cardiovasculares.

Los países en vía de desarrollo compartimos esta tendencia a engordar, por esto, la Organización Mundial de la Salud insta a los gobiernos a enfilar sus principales esfuerzos en medidas costo efectivas para contrarrestarla. El impuesto a las bebidas azucaradas es una medida que logra cambios eficaces en los comportamientos, desincentiva el consumo habitual de estas bebidas por niños y personas de más bajos recursos económicos, al tiempo que le brinda al Estado recursos para financiar el déficit de la atención en salud.

Pero hablar de impuestos saludables en Colombia es un tema vetado, así se lo hizo saber la SIC y Postobón a Educar Consumidores en 2016, cuando sacó su mensaje Tómala en Serio: promoviendo el consumo de bebidas sin azúcares añadidos y el impuesto a las gaseosas.

Cuando hemos querido emitir los mensajes de No comas más mentiras por medios pagos también nos han vetado, hemos acudido a herramientas legales, como la tutela, para amparar el legítimo derecho a mostrar la incontrovertible evidencia que existe entre el consumo habitual de bebidas azucaradas y los daños para la salud.

Hace unos días un importante medio nacional propuso un debate público, en el marco de la Ley de Financiamiento, sobre el Impuesto a las bebidas azucaradas, convocarían expertos, academia, industria y al Ministerio de Salud y Hacienda. El Foro se alcanzó a promover por redes sociales, nos inscribimos como asistentes, pero esta semana el Foro se cancela de manera inexplicable. Ojalá el medio informe si fue censurado y de donde provino el veto.

Es el momento para aprobar este Impuesto Saludable en el Congreso, le evidencia muestra la necesidad de una sobretasa para todas las bebidas con azúcar añadido (adicional al IVA plurifásico). Ojalá no ocurra como el 6 de junio pasado cuando la ANDI y FENALCO, en cabeza de sus presidentes y su poderoso Lobby, cambian en el Congreso el espíritu a la #LeyComidaChatarra. Para Colombia deben ser primero los derechos de la niñez y la salud de los más pobres, ¡que así sea!

*Directora Ejecutiva Red PaPaz

@Caropineros