¿Será niño o niña?

Catalina Uribe Rincón
06 de julio de 2017 - 02:00 a. m.

HACE UNOS AÑOS, MCKENNA POPE, una niña estadounidense de 13 años, inició una campaña contra la marca de juguetes Hasbro por hacer el microhornito Easy Bake Oven únicamente en “colores para niñas”. Frustrada por querer regalarle a su hermanito menor, amante de la cocina, un horno que sólo existía en colores rosado y morado, pidió a la compañía que creara un horno que fuera apto para niñas y niños, en otras palabras, un “juguete neutro”.

Después de lograr recoger alrededor de 40.000 firmas, la compañía Hasbro invitó a Pope y a su familia para que vieran el nuevo horno que podría ser utilizado por niñas y niños. Hasbro reconoció que la actividad de hornear era tan femenina como masculina y que todos podían coincidir en un horno azul. Pero, ¿qué tiene el azul que no tenía el morado o el rosado?

Me acordé del horno porque recientemente oí a una vendedora calmar a una pareja que buscaba un regalo para un bebé cuyo sexo todavía desconocían: “No se preocupen que las niñas también pueden usar verde o azul”. Estas formas de razonar tienen de fondo un argumento que se hace cada vez más fuerte, incluso en las mentes más progresistas y feministas: la categoría de lo neutro desprecia lo que concebimos como femenino.

Hace poco visité la casa del presidente estadounidense Thomas Jefferson, cuya cama se mantiene con la colcha original. Después de contarnos algunas historias sobre la independencia y la esclavitud, la guía turística preguntó si había alguna inquietud. La única pregunta la hizo un niño de cinco años: “¿Por qué la cama de Jefferson es fucsia?”. A lo que la guía respondió con naturalidad: “Porque antes el fucsia también era un color de hombres”.

El microhornito de Hasbro, que ha tenido vida desde 1963, se ofrecía originalmente en una decena de colores. Paradójicamente, en las dos últimas décadas, cuando la cocina se hizo inclusiva, tuvimos que distinguir entre hornito azul y el rosado. Y como a algunos les parece que el rosadito carece de carácter, pues azul para todos. ¿Será tan profunda nuestra desorientación en este mundo más grande y diverso que ahora nos dio hasta por privar a los niños del placer de los colores?

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar