De mentiras y realidades

POR MUCHO QUE INSISTAN LOS INTEresados en que nada está pasando en la bancada de Cambio Radical, no es creíble ni para el más ingenuo, la versión oficial del hasta hoy partido de Germán Vargas Lleras.

Por eso fue asombrosa la percepción de algunos periodistas que aseguraron que “la decisión (de apoyar el texto original del referendo pro-reelección) tomada en una reunión entre el director (de Cambio) y la bancada del Senado, puso fin a las especulaciones sobre un posible divorcio entre los miembros del partido”.

No es sostenible la teoría conciliadora de que esa colectividad sigue en la coalición gubernamental porque continúa apoyando los proyectos del uribismo excepto el de la reelección inmediata, la más preciada e íntima ambición del Presidente, así no se concrete, no por falta de ganas sino de legitimidad. El Primer Mandatario, experto en dinamitar desde adentro el esquema de partidos, no tiene ningún problema en dividir a Cambio Radical cuando lo desee. Lo está intentando desde ya a través de sus consejeros y ministros, si se le da lectura correcta a la oferta de, por ejemplo, Fabio Valencia Cossio con el cargo del Viceministerio del Interior. Valencia tampoco es creíble, por supuesto, con su ‘blandura’ ante la bancada de Vargas. Con el poder del Estado y la rendida colaboración de ciertos parlamentarios, el Gobierno pasará por encima de la pretendida unanimidad de criterios de los ‘radicales’ y no pocos de éstos cederán complacidos, si bien el pulso de Vargas Lleras al lograr una declaración conjunta de nueve senadores, no le salió mal.

Hay muestras de lo que en realidad está ocurriendo:

-De quince senadores, fueron nueve a la reunión. Además de que faltaron seis, Vargas Lleras debería saber que no cuenta con la lealtad de todos los presentes.

-Varios de los ausentes se disculparon, aunque algunos adhirieron a la declaración. De Nancy Patricia Gutiérrez, que no asistió dizque porque estaba enferma, se sabe que al otro día, o sea ayer, apareció, con aspecto de rosa, en un evento político menos comprometedor. No en vano Gutiérrez hizo los mandados que le solicitaron cuando presidió el Congreso, y el Presidente, a su vez, la defendió en público antes de que la justicia se pronunciara.

-También se sabe que son protouribistas los senadores Elsa Gladys Cifuentes, Antonio Guerra y Plinio Olano, entre otros. ¿Significa que no acompañarán a Vargas?

-Por el lado de la Cámara se ha explicado que los 22 representantes del partido no han podido hacer quórum porque están en vacaciones. Entre tanto, Roy Barreras, que debería descansar en su natal Valle del Cauca, no disimula la frecuencia con que visita la Casa de Nariño. Algo similar sucede con Tarquino Pacheco, quien no nació precisamente en Bogotá. ¿Cuántos miembros de la Cámara baja sacrificarían sus cuotas burocráticas por fidelidad a Vargas Lleras?

- Por último: En el mundillo del Capitolio se rumora que para llenar el vacío del Viceministerio del Interior ya le han pedido candidatos al consabido Barreras, al senador Antonio Guerra —hermano de la Ministra de Comunicaciones— y a Javier Cáceres. Vargas Lleras ha dicho que no avalará a nadie para ese cargo. Cuando se lo impongan con la colaboración de uno de los ex suyos, ¿insistirá en que pertenece a la coalición o lo echará? Esta es la realidad. Lo otro es pura versión oficial.