Soy amante de las pastas, ya sean cortas, largas o rellenas, frescas o secas. Y tanto lo soy, que me encanta el plan de hacer mi propia pasta en casa aplicando toda mi creatividad.
Con el método artesanal y sin mucho esfuerzo se puede hacer, por ejemplo, fetuccini, papardelle o lasagna, incluso sin necesidad de contar con una máquina; o ravioli, tortelloni o agnolotti, en el lado de las pastas rellenas.
A veces simplemente extiendo la masa y la troceo aleatoriamente en formas irregulares, pues me parece divertido salirme del ‘molde’. Luego, dejo secar la pasta durante algunas horas en un lugar fresco y seco, y la preparo con alguna salsa en la que generalmente aprovecho los ingredientes más frescos que tengo a mano.
Es el caso de la preparación que les quiero presentar esta semana, y que consiste en una pasta casera (aunque también se pueden utilizar láminas de lasagna secas), con una salsa de espinacas, salmón ahumado y ajos cremosos, una receta muy fresca y sin tantas complicaciones.
Ingredientes para 2 personas
1 libra de pasta fresca o de hojas de lasagna en trozos
200 gramos de salmón ahumado
4 dientes de ajo machacados
2 cucharadas de aceite de oliva
2 cucharadas de mantequilla
2 tazas de hojas de espinaca fresca y lavada
1/4 de taza de vino blanco
1/2 a 3/4 de taza de crema de leche
1 yema de huevo
Queso parmesano o pecorino rallado
Sal y pimienta negra
Pasta fresca con espinacas, salmón ahumado y crema de ajo
PreparaciónCocine la pasta en abundante agua con sal, hasta al dente. Mientras tanto, en una sartén con el aceite de oliva sofría el ajo y antes de que empiece a dorar agregue la mitad del salmón y las hojas de espinaca. Cocine un poco y añada el vino blanco y la crema de leche. Deje reducir un poco. Integre la mitad del queso parmesano, la mantequilla y la yema de huevo (o un huevo entero, si quiere más cremosa la salsa). Mezcle la pasta y por último incorpore el resto del salmón. Sazone con sal y pimienta y sirva con el resto del queso encima.
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