¿Fuera Osorio?

“Fuera Osorio” fue el grito que se sintió desde el fondo del alma de los aficionados mexicanos en el estadio Azteca tras la victoria del Tri ante Escocia por 1-0. Extraña manera de darle ánimo al grupo de cara a la Copa del Mundo. El rechazo al DT colombiano no pasa por lo futbolístico, y eso que cuenta con un grupo de jugadores apenas normal, pues los hermanos Dos Santos nunca despegaron, Chicharito Hernández nunca encontró la regularidad que se esperaba y ninguno juega en algún equipo realmente grande de Europa. Con todo y eso, México hizo la mejor eliminatoria en mucho tiempo y se firmó en el Mundial con anticipación.

Olvidaron que con la misma base de jugadores clasificaron a Brasil hace cuatro años gracias a una remontada de última hora de Estados Unidos contra Panamá y no por méritos propios.

Y si en algo nos parecemos mexicanos y colombianos, es en la prepotencia de un sector de la prensa deportiva que termina influyendo en el colectivo de la gente. El rechazo a Osorio desde los micrófonos tiene matices extrafutbolísticos que van desde conflicto de intereses entre canales de televisión hasta xenofobia manifiesta por parte de personajes como Hugo Sánchez, quien como jugador fue magnífico, como entrenador apenas normal y como comentarista es un completo payaso, pero influye en el sentir de la gente. Sánchez y su séquito no conciben que el DT de su selección sea un colombiano. Si Osorio fuera argentino, brasileño o español, estarían maravillados con sus disruptivos métodos importados de Inglaterra.

El discurso de sus detractores caló en la gente tras la victoria por la mínima ante Escocia, un resultado que para el resto del mundo es normal. Una selección conformada por jugadores apenas aceptables venció a otra integrada por jugadores un poco menos aceptables. En fin, el fútbol se da para estas cosas. Un país que se queja por la xenofobia que padecen sus compatriotas en Estados Unidos, pero que ataca a Osorio, un colombiano que lo único que ha hecho es trabajar, llevar métodos diferentes, ganarse a su grupo de jugadores y obtener resultados que hace rato no se conseguían en un país que ya olvidó lo que es jugar el quinto partido en un mundial hace 32 años. Ojalá lo logren en Rusia y Osorio se vaya rápido de ahí. Ya volverán a su estado natural de mediocridad futbolera.