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Los cargos femeninos
Es hora de que se borren las autorizaciones de usar el masculino para una mujer, pues se encuentra en nuestros periódicos que a las mujeres se les trata con ambas formas, masculino y femenino. Veamos cómo a una mujer (la misma) se la trata unas veces en masculino y otras en femenino: «Mónica María Pabón, nueva gerente del Centro». Debe ser: «nueva gerenta del centro». La minúscula de «centro» es correcta, dado el caso de que en Medellín no existe un barrio que se llame «Centro». Otras formas de llamar a Mónica María en el periódico Centrópolis son: arquitecta, consultora, directora, coordinadora. Si utilizan cuatro formas correctas en femenino, por qué no ajustan cinco, dado el caso que tal femenino existe: la gerenta. Sin femenino: magíster. Validar este no tiene más dificultad que aplicarle una «a» terminal: magístera.
Lo correcto y lo incorrecto
Lo correcto: «Se verificó que a ninguno se le hicieron los procedimientos médicos». En vez de: «a ninguno se les hicieron los procedimientos médicos». El Colombiano.
Una sola letra
«Quizás usted sea de los que ha tenido la oportunidad de encontrárselos rodando en Medellín». El Colombiano.
«Quizás usted sea de los que han tenido la oportunidad de encontrárselos rodando en Medellín». Una sola letra. ¿La encontró?
Los “tierreros”
«Las tácticas de los “tierreros”». El Espectador.
A la palabra “tierreros” le estoy permitiendo las comillas que tantas veces rechazo y voy a decir por qué. En el Diccionario los tierreros no son personas sino lotes en los cuales se tiene en cuenta la calidad de la tierra. ¿Por qué la autora de esta nota pone la palabra “tierreros” entre comillas? Respondo: pues estos “tierreros” no son tierra, sino unas personas que invaden los terrenos que no son suyos. Esa palabra podrá ser correcta para escribirla sin comillas y con su puesto en el Diccionario.