Lo particular de las casas

Y las casas particulares. Ahora, cuando el encierro obligatorio le da inusitada importancia a la morada de cada cual, donde discurren sus horas y cuando los presentadores de noticias se asoman desde sus ámbitos privados, las curiosidades hogareñas se dejan ver y entretienen a los espectadores.

Y es que los que estamos escuchando, ya fatigados, la misma noticia, no sabemos qué nos espera. Es la incertidumbre. A lo dicho por la Cepal de hallarse el continente frente a una muy próxima o ya actual recesión, sigue el espanto transformador de todas las situaciones preexistentes. Dejo este análisis a quienes lo vienen haciendo, por cierto en forma repetitiva.

Yo me entretengo atisbando lo que muestran en su entorno los presentadores y personajes de la televisión, desde sus residencias. Se supone que han hecho algún arreglo previo, como cuando se espera una visita y se acomodan, al menos, los cojines de la sala. Los más exponen sus libros, no para posar de intelectuales, ya que en toda casa hay libros, muchos que su dueño nunca consulta, pero que están ahí porque además son elementos decorativos. Se observa alguna lámpara, uno que otro cuadro pintado o láminas de regular factura, aunque prefiero decir que es muy respetable el buen o mal gusto de quien nos está abriendo su espacio privado. Gracias.

Los objetos hablan por sí solos. Dicen que las cosas se parecen a su dueño. A veces me pregunto –mientras observo, estoy escuchando lo que se dice- cómo y cada cuánto se asean los libros, que reciben el polvo de nuestro olvido, muy bien encarrados, sí, pero casi nunca protegidos por una vitrina. Hay quienes, muy discretos, se dejan ver desde algún jardín interior, sin mostrar detalles que comprometan su privacidad. Celosos comunicadores y comunicadoras, que parecen ser y son nuestros amigos, pero a los que tampoco hay que pedirles que nos hagan partícipes de su intimidad.

Presentadores de deporte también se muestran en sus aposentos privados. Causa risa ver a los noticieros pasar a la sección de deportes: ¡Y ahora, la actualidad deportiva! En esta dura época en que sólo se dan aplazamientos y cancelaciones. Los hinchas, los fanáticos, los fans, los propios deportistas, díganme, qué estarán sintiendo.

No sabe uno cómo dos voces al unísono (bueeno), Duque y la alcaldesa, han podido cercenar toda manifestación de vida en una metrópolis como Bogotá, y en otras capitales del país, en cada una su alcalde. Es el poder institucional. Y aun habiendo desmanes por parte de quienes siempre quedan excluidos y marginados, tal es el desajuste social, sorprende la unidad de mando que impide el caos. Existe obediencia y si se dijo “quédate en casa”, todos, y entre ellos los que se asoman por la tele con sus floreros, sus cojines multicolores y sus espacios -que Dios les guarde- todos obedecieron.