Noticias de Venezuela

Armando Montenegro
12 de julio de 2020 - 05:00 a. m.

Con frecuencia, las noticias de Venezuela giran alrededor de las grandes fortunas y los delitos de sus gobernantes y sus secuaces: sus relaciones con los carteles de la droga, las capturas por la Interpol, cuentas en paraísos fiscales, mansiones en Estados Unidos y Europa… Eso sí, se conocen pocas cifras porque las dictaduras repudian las estadísticas que las delatan: el Banco Central de Venezuela, por ejemplo, no publica datos de inflación desde 2015.

Pero, cuando se filtran informaciones sobre la realidad social y económica de ese país, saltan a la vista evidencias aterradoras de las consecuencias del chavismo. Al respecto, acaba de publicarse la Encuesta de Condiciones de Vida del Venezolano en 2019, un estudio realizado por tres prestigiosas universidades, que analiza datos de casi 10.000 hogares. Sus resultados son alarmantes:

(i) El 96 % de los venezolanos son pobres y cerca del 80 % está en la pobreza extrema. En Colombia, antes de la pandemia, estas cifras eran del 27 % y el 7 %, respectivamente.

(ii) A pesar de que los venezolanos se han nivelado por lo bajo —casi todos son pobres—, la desigualdad, medida por el índice Gini, ha aumentado por encima del 51 %, un nivel semejante al de otros países latinoamericanos. Solo los gobernantes, los militares, sus aliados, los boliburgueses y sus cómplices son ricos.

(iii) El 68 % de los venezolanos consumen menos de 2.000 calorías diarias, por debajo del mínimo requerido para mantener una vida saludable.

(iv) La situación de los niños menores de cinco años es todavía más crítica: el 30 % de ellos sufren de desnutrición crónica o tienen una talla baja (en Colombia y Perú estos porcentajes son del orden del 3 %).

(v) En el panorama internacional, por las carencias de su población, Venezuela solo se puede comparar en el continente americano con Haití y ya se sitúa en el grupo de los países más pobres del mundo, al lado de Nigeria, Chad, Congo y Zimbabue.

(vi) A causa de la emigración, Venezuela perdió a cuatro millones de habitantes, la mayoría jóvenes, un hecho que tendrá un perdurable efecto sobre su crecimiento.

(vii) El ingreso per cápita de Venezuela, que fue hace décadas el doble y hasta el triple del colombiano, es hoy bastante menos de la mitad del mismo.

¡Y estos datos reflejaban la situación de antes de la pandemia!

La destrucción de la economía y el empobrecimiento de Venezuela en menos de ocho años es una de las catástrofes sociales más dramáticas de este siglo, especialmente porque ocurrió en un país rico en recursos naturales, con una población joven, y no fue ocasionada por accidentes naturales, plagas o terremotos. Simple y llanamente fue la consecuencia de la ineptitud, corrupción y brutalidad de sus gobernantes.

Ante el bloqueo de los canales democráticos, que hubieran permitido que el pueblo optara en las urnas por el retiro pacífico del chavismo, millones de personas no tuvieron otra alternativa que emigrar, tal como lo hemos sentido en Colombia, el principal destino de nuestros empobrecidos vecinos. Y, ante la confusión de la oposición, las enormes torpezas de Estados Unidos y el hábil juego del chavismo en el ajedrez internacional, al lado de Irán, Rusia y China, no es claro cómo el pueblo de Venezuela va a salir de la tragedia en que se encuentra. Mientras tanto, seguirán la pobreza, la represión y la criminal arbitrariedad de la narcodictadura de Nicolás Maduro y sus esbirros.

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