Publicidad

La poderosa Ñ

Yohir Akerman
02 de octubre de 2016 - 02:00 a. m.

El pasado 3 de junio se inauguró con la presencia del Presidente Juan Manuel Santos un lujoso campo de fútbol en Sahagún, Córdoba, que costó la bicoca de 14.484.795.194 millones de pesos.

El Estadio Municipal Armando Tuirán Paternina cuenta con tribunas para 4.160 espectadores sentados, grama sintética, camerinos de primera categoría, taquillas electrónicas, zona para prensa, pantallas gigantes, jardines y consultorio médico.

Un lujo.

Especialmente para un municipio de 130.000 habitantes con unas necesidades inminentes que no han sido atendidas como inversión en equipos de salud, mejoras en la infraestructura de educación o la construcción de un alcantarillado en los corregimientos para optimizar las condiciones sanitarias.

Pero aparentemente nada de eso es tan importante como poder contar con cuatro torres de iluminación en el estadio para partidos de fútbol nocturnos, sobre todo para poder jugar la Liga Ñ. (Ver Video promocional Liga Ñ)

Esta lujosa liga convoca 20 equipos de cuatro municipios fuera de Sahagún y a cada uno de ellos la organización les entregó una dotación que incluye tres tipos de uniformes, guayos y canilleras. (Ver Fotos Liga Ñ)

La Ñ es la insignia del senador cordobés Bernardo Miguel Elías Vidal, alias “el Ñoño”, y este costoso estadio lo licitó la Alcaldía de ese municipio en cabeza del señor Carlos Alberto Elías Hoyos, primo del poderoso Ñoño. 

Según una investigación de los periodistas Santiago Ángel y Camilo Acosta Villada, el contrato 0043 de 2013 fue firmado por el, en ese momento, alcalde Elías Hoyos con la Unión Temporal Berakah. El objeto era la construcción del complejo deportivo con un presupuesto de 11.455.315.381 millones de pesos y un plazo de 11 meses para su construcción. (Ver Contrato 0043 de 2013)

El representante legal de la Unión Temporal Berakah era el señor Alfredo Ramón Bula Dumar, ingeniero industrial que trabajó con los Nule y participó en el cuestionado proyecto del Túnel de la Línea. (Ver Representante legal Unión Temporal Berakah)

En marzo de 2015, después de dos años de estar al frente del proyecto de Sahagún, y pese a las objeciones del director de Planeación Nacional, el señor Bula Dumar dio un extraño paso en su carrera al ser nombrado por el presidente Santos como gerente del Fondo Financiero de Proyectos de Desarrollo, Fonade. (Ver Objeciones de Simón Gaviria)

El Fonade es una de las entidades más poderosas e influyentes del gobierno, ya que, con un presupuesto anual cercano a los tres billones de pesos, tiene a su cargo grandes proyectos de inversión en Colombia como las autopistas de cuarta generación. Es decir es clave para la entrega de buena mermelada.

La investigación encontró que el nombramiento de Bula Dumar fue empujado agresivamente por el grupo del Ñoño, entre otras, para asegurar la terminación del Estadio Municipal Armando Tuirán Paternina, ya que la obra tuvo un sobrecosto de 3 mil millones de pesos y una demora de dos años más de los pronosticado.

Bula Dumar pasó de contratista a contratante sin que nadie se despeinara. Desde su entrada a la entidad su papel fue clave para involucrar al Fonade en la terminación del complejo deportivo de Sahagún. Y lo logró. (Ver Fonade entregó el parque estadio municipal en Sahagún

Pero extrañamente un mes después de la inauguración del estadio, el señor Bula Dumar renunció a la dirección del fondo y en su remplazo, el 19 de julio, se nombró al señor Ariel Alfonso Aduen Ángel.

Poco cambió ya que el nuevo director del Fonade es muy cercano al ex obernador de Sucre, Eric Julio Morris, condenado por parapolítica en 2007 y quien es suegro de, nada más ni nada menos, el senador Bernardo "Ñoño" Elías.

Para colmo de males, el señor Aduen cuenta con serias acusaciones en su contra como haber sido colaborador del Bloque Héroes de Montes de María, temido grupo paramilitar comandado por Rodrigo Mercado Peluffo, alias ‘Cadena’.

Pero nada de eso importa.

Ya que controlar el Fonade es un bastión de poder muy importante que el congresista de Córdoba utiliza para aumentar la “ñoñomania”, financiar construcciones como este estadio para su liga de fútbol y, sobre todo, meter unos golazos al erario público.

@yohirakerman
akermancolumnista@gmail.com
 

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar