Si dice que es Rubem Fonseca, no le abra

Julio César Londoño
10 de abril de 2021 - 03:00 a. m.

Ojo, Tusquets anda vendiendo los cuentos más descosidos del mundo con el gancho de que son de Rubem Fonseca. ¡No puede ser! El libro se titula Carne cruda y encierra perlas como el relato titulado «Falso» (pág. 47): «En la morgue. Examino su rostro bronceado, ojos azules, dientes perfectos. En la morgue. Acostado en el ataúd, pálido, ojos cerrados, boca cerrada. El lugar está vacío. Me inclino y con los dedos abro sus párpados. ¿Dónde están sus rutilantes ojos azules? Solo un iris de color oscuro, él usaba lentes de contacto. Aparto sus labios, veo los dientes, sacudo el maxilar y la dentadura se mueve. Postizos. Todo él era falso». Punto final.

Si esto es de Fonseca, yo soy la mamá de Sófocles, el papá del cuento policiaco.

Rubem Fonseca tenía una fórmula inédita: crimen + sexo + teoría literaria. Son relatos policiacos mezclados con reflexiones sobre el oficio de la escritura, porque el protagonista es un escritor. El sexo está apenas sugerido. Dos pinceladas eróticas para mantener la tensión y ya. «Mi vecina tiene dos piernas largas y unas gafas Ray-Ban que le sientan muy bien». Fonseca no es como Vargas Llosa, por ejemplo, que le tira al pobre lector un polvo explícito cada 27 páginas. Y sus reflexiones literarias no son librescas (así evitaba que el cuento se le volviera ensayo) sino que tienen un aire sincero y vital, como las que rumiaría un escritor solitario en un bar. Y son cínicas, claro, como tienen que ser las reflexiones de ese ángel caído que es el hombre contemporáneo, consciente ya de su ruindad, de que las máximas ejemplares están muy bien para las fábulas infantiles y que a los adultos solo nos resta enfrentar el espejo de la envidia y decirnos sin rodeos: «En la desgracia de un amigo hay algo que no nos molesta».

«Aparecida» (pág. 17) es otro cuento antológico: «Ella me pidió dinero para ir a visitar a su hijo en Navidad. No veía a su hijo desde hacía más de diez años, cuando se fue de la casa expulsada, o por propia voluntad, no sé, y se fue a vivir a la calle como mendiga, borracha, fue así como la conocí, tambaleante y diciendo groserías. Ahora ya no bebía, Jesucristo la había salvado, Jesucristo y yo, que le presenté a Jesús diciendo Jesús quiere salvarte, y como ella sabía leer le di una Biblia de bolsillo, de esas hechas para semianalfabetos. Empezó a leer la Biblia todos los días y ya no bebía ni mendigaba». Fin.

Nota: reconozco que el original está diagramado como un poema y que esta prosaica transcripción pudo arruinar su música honda y delicada. ¿Creía Fonseca que el secreto de la poesía radicaba en alternar renglones cortos y largos? No, era Rubem Fonseca. Es más probable que la idea haya sido de algún diseñador listillo que quiso disimular la vacuidad de la historia con las prestigiosas formas del verso.

Como todos los cuentos de Carne cruda son tan malos como los citados y están escritos en una copia chapucera del estilo de Fonseca, cabe preguntarse: ¿son de Fonseca? ¿Los escribió al final, en un desvarío senil de su avanzada edad? Si fue así, es imperdonable que su agente, los herederos o la viuda le hayan entregado esos engendros a la editorial.

La torpeza editorial de publicar estos anticuentos y afrentar la memoria de Fonseca es comprensible: el negocio consiste en esquilmar autores y lectores por igual, sí, pero de tarde en tarde debían contenerse y disimular sus incisivos, sobre todo cuando las obras estén crudísimas.

P.S. Antes de morir, los autores de relatos policiacos debían tener la precaución de asesinar a su editor, a los herederos y al cónyuge, por supuesto.

P.S.2. El sustantivo «relato» cubre cuentos, novelas, dramas y chismes.

P.S.3. «A una novela sin muerto le falta vida». G. K. Chesterton.

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jmurillo(10525)11 de abril de 2021 - 01:51 a. m.
Como escribió abajo un comentarista, ya se le estaba extrañando desde "La lengua esa oreja". Aunque no he leído a Fonseca, confieso por ahora que lo haré por el deleite y sembrar la curiosidad de todas sus acertadas críticas, bien ponderado Julio César.
Alberto(3788)10 de abril de 2021 - 10:21 p. m.
Excelente, muy certera disección.
Mar(60274)10 de abril de 2021 - 09:24 p. m.
Muy buena columna.
Lorenzo(2045)10 de abril de 2021 - 08:46 p. m.
Por un momento me entusiasmé porque de inmediato saltó al imaginario del 'stage' residual que decantan algunas escenas del cine. En Eyes Wide Shut, el 'médico' Tom Cruise se inclina ante el gélido cadáver de una diosa, que en vida se elevaba 1.80m., tendido sobre una inmensa bandeja en una de esas asépticas y solitarias morgues gringas pintadas por el genio de (este si auténtico) Stanley Kubrick-
  • Gines de Pasamonte(86371)10 de abril de 2021 - 10:12 p. m.
    Lorenzo. En su libro: “Esculpir en el tiempo”, decía Andrei Tarkovski que: “la obra de arte lo es más cuánto más ocultas quedan las intenciones del autor”. El canto del cisne del genio Kubrick, nos dejó esta obra maestra como colofón a una carrera brillante. De ritmo lento y pulcra fotografía, aderezada con esas sugestivas notas musicales del vals de Shostakovich.
  • Lorenzo(2045)10 de abril de 2021 - 09:02 p. m.
    ...lo berraco de este mental coïtus interruptus suscitado al inicio de la columna es que en la cinta de Kubrick hay mucha piel desnuda pero ningún polvo de parte de los personajes (salvo el frío metesaca de la editada saturnalia). La escena en la morgue pareciera prolongarse innecesariamente. En el magistral manejo de la pausa dentro de la trama, Cruise no está revisando caries. Se derrumba.
Caliche(62305)10 de abril de 2021 - 01:28 p. m.
Don Julio César, gracias por su regreso. Se le extraña. Cuando leí El cobrador de Fonseca odié a todo el mundo. Un fragmento: “A veces digo para mí, y hasta para fuera ¡todos me las tienen que pagar! ¡Todos me deben algo! Me deben comida, coños, cobertores, zapatos, casa, coche, reloj, muelas; todo me lo deben (…) ¡No pago nada!
  • Gines de Pasamonte(86371)10 de abril de 2021 - 02:49 p. m.
    Carlos Mario. No en vano afirmaba Shakespeare en Hamlet: "!Dadle a cada cual el trato que merece y nadie escapará de una paliza"¡
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