Teleantioquia: capítulo cerrado

La noticia estuvo en todos los medios en Colombia. Estoy acostumbrado a contar las noticias, no a ser el centro de una. Pero así fue.

Denuncié que el consejo de redacción de Teleantioquia Noticias estaba siendo grabado, chuzado, que nos escuchaban en la Asamblea de Antioquia –y quién sabe dónde más- y en consecuencia con el manejo que se le dio a la situación renuncié a mi cargo.

Han pasado exactamente seis meses desde el delito que se cometió en la sala de redacción de Teleantioquia Noticias. Poco o nada se sabe de los avances de las investigaciones de la Fiscalía. Aquí un recuento de los personajes de la historia y lo que ha pasado desde tan sonado escándalo.

Personaje 1: Adolfo León Palacio. Diputado antioqueño que le llevó la grabación del consejo de redacción a la gerente de Teleantioquia Selene Botero para pedir mi cabeza. Días más tarde le negó a Daniel Coronell haber hablado con la gerente y haber entregado grabación alguna. Dos días después y luego de verse acorralado en su mentira, admitió haberse reunido con Botero y tener en su poder la grabación que según él, le llegó a su oficina por arte de magia. El diputado es discípulo, amigo -y casi hermano- del expresidente del Congreso y condenado autor intelectual de la masacre de Segovia, César Pérez García.  Durante la semana del escándalo, Palacio amenazó con denunciarme en la Fiscalía en el pleno de la Asamblea. Sus compañeros diputados aplaudieron la decisión. Seis meses después no lo ha hecho. Sólo fue alarde. Nunca me demandó, se quedó calladito, su rabo de paja le impidió ir a la Fiscalía. ¿Dónde le quedó la valentía y la indignación de ese debate? Sigo esperando su denuncia.

Personaje 2: Julián Bedoya. Este joven politiquero antioqueño fue hasta este año diputado, y en 2012 fungió brevemente como presidente de la Asamblea de Antioquia gracias a una sucia jugada que sacó del camino al entonces presidente Héctor Garro. Meses antes del escándalo, en marzo, Bedoya Pulgarín renunció a la Corporación para no inhabilitarse y lanzarse a la Cámara de Representantes por el Partido Liberal. Hoy es el número 7 en la lista de Antioquia y su padrino es el personaje 1 de esta columna. Ambos tienen algo en común: su faro y guía político es el ya mencionado político condenado por ser autor intelectual de la masacre de Segovia, César Pérez García. La pregunta clave del incidente de la chuzada es, ¿si Bedoya ya no era diputado, por qué estaba entregándole la grabación a la gerente en compañía de Adolfo León? Pues bien, Palacio dijo en su momento que Bedoya era cercano a Selene Botero. Falso. Se odiaban. Selene es una señora muy decente para tener ese tipo de amistades. Tal vez, con el siguiente personaje, se podrían atar algunos cabos.

Personaje 3: María del Pilar Rodríguez. Estudiante de Comunicación Social y Periodismo de la Universidad Pontificia Bolivariana. La conocí haciendo las menciones comerciales del noticiero, trabajo que aún conserva. Se presentó a las entrevistas para hacer las prácticas en Teleantioquia Noticias y fue admitida. Es una joven inteligente y curiosa. Tiempo después, trascendió que María del Pilar es novia del diputado Julián Bedoya, personaje 2 de este relato. Nunca lo supe, ni tenía porque saberlo. Las relaciones íntimas no son del resorte de ningún director de medio. El actual director de Teleantioquia Noticias, Jorge González, tomó la iniciativa de practicar la prueba del polígrafo a todos los empleados para buscar el culpable. Todos lo hicieron a excepción de María del Pilar, quien se negó rotundamente y así se lo manifestó al fiscal del caso. Dice la practicante que ella no estuvo el día de la grabación en el consejo de redacción. La verdad, no recuerdo si estaba allí o no, pero su noviazgo con Bedoya, quien ya no era diputado y estuvo en la oficina de la gerente entregando la grabación en que yo me referí enérgicamente sobre las ausencias de los diputados a las sesiones de la Asamblea, genera bastantes dudas. Tuve una buena relación con María del Pilar durante el corto tiempo que compartí con ella, por lo que me cuesta creer que hubiera sido capaz de hacer algo semejante.

Personaje 4: Melissa Henao. Estudiante de Comunicación Social de Eafit. Ella fue alumna mía en esa universidad y gracias a su buen rendimiento y experiencia, la invité a formar parte del equipo de Teleantioquia Noticias. Por los días del escándalo, ella cubría la fuente de Asamblea y Gobernación. Evitó el polígrafo mientras pudo, pero terminó sometiéndose a la propuesta del nuevo director. ¿El resultado? Fue la única que no pasó la prueba. Hace algunos días Melissa salió de Teleantioquia, según Clara Marcela Mejía -nueva gerente del canal- el motivo es la ausencia de título universitario de Melissa quien aún no se gradúa. Conmigo Melissa fue siempre cercana, por lo que me sorprendió enormemente el resultado de la prueba. ¿Un polígrafo es infalible?. 

Personaje 5: Selene Botero. Fue la gerente de Teleantioquia. Dos meses después del escándalo, renunció, según ella, para ocuparse de asuntos personales. Otros afirman que le cobraron el pésimo manejo que le dio a la situación. Equiparar un acto delictivo con la falta de modales de un periodista y no denunciar de inmediato una grabación ilegal con la que pretendieron extorsionarla a ella y al Gobernador para presionar mi salida del cargo de director de noticias porque mis actuaciones fueron incómodas para muchos políticos, es propio de una mujer que le falta carácter y que no toma decisiones por su cuenta. Se las dictan desde Miami.

Todo este episodio me deja un sinsabor y una tristeza enorme. Sin embargo, sirvió para explorar nuevas experiencias y conocer de primera mano quiénes son mis amigos. También para reafirmar mis principios como periodista. Por amor a esta profesión cierro este capítulo. Que la investigación siga su curso.