Publicidad

Un gobierno de mala leche

Indalecio Dangond B.
12 de julio de 2013 - 11:21 p. m.

Impotencia. Si señores, eso es lo que sentimos la mayoría de los colombianos ante la indolente actitud del Gobierno frente a la crisis que viven los propietarios de más de 450 mil hatos ganaderos que hay en el país. La desatención revela además la ausencia de una política clara de comercialización de la leche.

Actualmente los ganaderos atraviesan enormes dificultades debido a que a los pasteurizadores les están cancelando los contratos de compra de la leche porque resulta más rentable para ellos, importarla a menor precio de países como Estados Unidos, Argentina o Uruguay. En el transcurso del año pasado el Gobierno permitió una insólita importación superior a las 25.000 toneladas de leche en polvo de países con los cuales hemos suscritos TLC´s, cuando los promedios históricos de importación se ubicaban en el orden de las 2 mil toneladas anuales. Me pregunto ¿quién estará beneficiándose a costa de la quiebra de mas de 350 mil pequeños ganaderos del país?

Lo anterior es otra muestra de lo mal orientada que está la política agropecuaria de este país. ¿Cómo es posible que el Ministro de Agricultura a estas alturas del paseo no haya previsto siquiera una estrategia de concertación con el sector lácteo para garantizar el precio, la oferta y demanda de la leche del país, a fin de garantizar un ingreso justo a los ganaderos? Claramente las dificultades de los ganaderos y agricultores no se resuelven repartiendo subsidios sin el debido control, más aun, cuando el Ministro de Hacienda acaba de notificarle a los cafeteros que no puede mantener las ayudas en el tiempo por la insuficiencia de recursos públicos. Ya esta bueno de tanta demagogia y utopías que solo contribuyen a perpetuar los problemas del campo. El populismo desmedido está destruyendo la dignidad de los campesinos en vez de levantar su autoestima.

Los ganaderos de Colombia necesitan urgentemente una política integral (acordada con el sector empresarial) agropecuaria que ayude a contrarrestar y eliminar las causas de las ineficiencias del negocio de la ganadería. Tenemos unos productores pobres, porque nadie les ha enseñado a producir, administrar y comercializar con eficiencia. Los burócratas de Corpoica que tienen esta misión y para lo cual se les ha entregado una chequera de $ 57.000 millones al año, se la pasan viaticando en el exterior, sin ningún resultado concreto a la fecha. Ni siquiera se han tomado el tiempo para ir a conocer el programa de diversificación de producción leche/carne de Colanta.

Estos visionarios de Colanta, apoyándose en la teoría de que la sobreproducción es la causa principal de los bajos precios de la leche, implementaron un programa de compra de terneros de 24 meses a un precio de 5 mil pesos el kilo, para producir chorizos, jamon y salchichas de ternera para el mercado externo. Es decir, convirtieron el excedente de leche en una oportunidad de negocio de carne logrando mayores ingresos a los pequeños y medianos productores ganaderos.

Si el Gobierno se propusiera superar la mala leche con los ganaderos y avanzara en la expedición y aplicación de las normas que garantizan, por ejemplo, la trazabilidad y la inocuidad de la carne en toda la cadena, podríamos entrar con estos productos a mercados importantes como Estados Unidos, Canadá y Unión Europea. Es una vergüenza, que de 656 plantas de sacrificio que existen en el país, tan solo 12 cumplan con los estándares de exportación. Es hora que estos burócratas cambie el PowerPoint por las botas pantaneras.

Nota: Al comandante del ejercito y a los directores de la policía y el ICBF, les recomiendo revisar si el proveedor les esta vendiendo leche importada. Seria el colmo!

@indadangond

 

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar