Vecindario en llamas

Marcos Peckel
28 de mayo de 2013 - 10:46 p. m.

Jerusalén. El día de ayer a las 12:30 sonaron en todo Israel las sirenas que anuncian un ataque con cohetes y misiles.

Aunque se trataba de un simulacro, el acontecer en la región no descarta que esto pueda ser realidad en algún momento.

Noventa y cinco mil muertos más tarde, el conflicto en Siria se complica cada vez más, ante la impávida inacción de Occidente, que sigue haciendo cálculos geopolíticos, mientras que Irán y Hizbolá, tal como lo anunciara públicamente su jefe Hasán Nasrala, se la juegan toda con el genocida de Damasco, Bashar al Asad. Las porosas fronteras del Levante caen ante lo que evidentemente se ha convertido en una guerra sectaria de suníes contra chiitas en la región toda. Milicianos suníes iraquíes y libaneses, juntos con yihadistas aliados de Al Qaeda provenientes de varios países, luchan en tierra siria contra Al Asad, mientras chiitas de Irak, Irán y Hizbolá defienden al tirano. La unión europea finalmente decidió armar a los rebeldes sirios, a lo que Rusia respondió anunciando el envío de sofisticado armamento a Al Asad.

Israel ya ha realizado operaciones militares y bombardeos contra supuestos cargamentos de armas a Hizbolá, mientras que obuses aislados lanzados desde territorio sirio han aterrizado en el Golán israelí. En Irak la guerra sectaria entre suníes, chiitas y kurdos arrecia una vez más sin que el gobierno chiita de Al Maliki haga nada por prevenirla, mientras que en Líbano el muy precario equilibrio entre cristianos, suníes, chiitas y drusos amenaza con colapsar por la guerra siria.

En Egipto la caída de Mubarak ha generado un ambiente político altamente inestable por la disputa entre la Hermandad Musulmana y grupos liberales por determinar el futuro de la más importante nación árabe, mientras que el Sinaí, frontera con Israel, se ha convertido en tierra de nadie con alta presencia de grupos yihadistas que incluso atacaron una base de las Fuerzas de Paz colombianas allí estacionadas.

En este explosivo entorno regional se han acelerado los intentos por reiniciar el proceso de paz entre Israel y Palestina. La Liga Árabe refrendó su iniciativa de paz de 2002 con significativas modificaciones. Hasta los chinos emitieron su propio plan de paz. El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, ha tratado ingentemente de convencer a las partes de sentarse en la mesa. Podría lograrlo, pero sería sólo el comienzo de un muy complejo y tortuoso camino con pocas garantías de éxito.

El presidente Juan Manuel Santos vendrá por estas tierras la próxima semana. En Jerusalén espera dar el toque final al acuerdo de libre comercio entre ambos países y en Ramala, una visita de cortesía.

Acá en Jerusalén, ciudad sagrada para judíos, cristianos y musulmanes, la vida transcurre dentro de la cotidianidad de una ciudad moderna. La gente acude a sus trabajos sin pensar en el vecindario. Hasta que ululan las sirenas y todos van ordenadamente a los refugios. Por ahora es sólo un simulacro.

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar