El ministro del Interior, Fernando Carrillo Flórez, condenó los hechos en los que siete personas perdieron la vida cuando el conductor del vehículo en el que se transportaban perdió el control del automotor tratando de evitar las piedras que le lanzaban manifestantes y se estrelló contra una vivienda en el municipio de Cáceres (Antioquia).
El jefe de la cartera política aseguró que estas acciones violentas son producto de la infiltración de actores armados en las mismas. (Lea más sobre la protesta que terminó en tragedia).
Reiteró que si bien el Gobierno Nacional respeta la protesta social no permitirá que se sigan produciendo vías de hecho.
Carrillo aseveró que la violencia y los desmanes no son el camino para obtener resultados o soluciones a las problemáticas que viven los colombianos, sino el diálogo y la concertación.
La protesta se produce en el marco del paro minero que cumple 25 días en esa región del Bajo Cauca Antioqueño.