El contralor general, Edgardo Maya Villazón, lanzó este lunes fuertes crítica al proceso de elección de su sucesor, que culminará el próximo 16 de agosto con la votación por los aspirantes en el Congreso en pleno.
En un foro sobre corrupción, en la Universidad Externado de Colombia, Maya señaló que “el Gobierno Nacional no necesita un contralor de bolsillo. Hay que nombrar una persona independiente”.
Seguidamente, se refirió a las reglas del juego que fueron determinadas por el Congreso para elegir a la próxima cabeza del ente de control. “Han rechazado que normativamente no podría acceder la Contraloría una persona que fuera sancionada disciplinaria o fiscalmente. Eso no tenía presentación (…) Después pusieron y suprimieron la norma que dice que quien tenga relaciones de parentesco con parlamentario no podría ser contralor de la República”, criticó Maya.
El jefe de la Contraloría equiparó el hecho de poner un “un corrupto a manejar la Contraloría” con el de “nombrar de director de un jardín infantil a un violador”.
El proceso de elección de contralor está en su punto más álgido, pues, el Congreso en pleno fue convocado para el próximo jueves para votar por los 10 aspirantes que serán seleccionados luego de las audiencias públicas que se realizan este lunes.
Contexto: Elección de contralor: el cambio en una resolución del Congreso que tiene nombre propio
Todo se desarrolla, además, en medio de una reciente denuncia hecha por la Red de Veedurías Ciudadanas, en la que señala que se suprimió el artículo 4 de la resolución expedida por la mesa directiva del Congreso, en el que se señalaba que “No podrá ser elegido contralor general quien sea o haya sido miembro del Congreso u ocupado cargo público alguno del orden nacional, salvo la docencia, en el año inmediatamente anterior a la elección. Tampoco podrá ser elegido quien haya sido condenado a pena de prisión por delitos comunes”.
Para la organización ciudadana, esta acción pretendió beneficiar específicamente al aspirante José Félix Lafaurie, cercano al uribismo y esposo de la senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático.