Hace diecisiete años nació en Colombia un proyecto que hoy es símbolo de confianza y desarrollo para miles de droguistas independientes: Droxi Colombia S.A.S. Lo que comenzó como un sueño en la mente de su fundador, Enrique Acuña Aguirre, hoy se traduce en más de 3.000 droguerías afiliadas, presencia en 550 municipios y la consolidación de una red que se hace llamar, con razón, “la droguería de los colombianos”.
“Fue grande —recuerda Acuña al hablar de aquel primer día—. Primero el sueño de imaginarse con droguerías por todo el país, donde nos unimos a droguistas, unos naciendo, otros ya con su negocio más maduro, otros grandes, y poder ser uno parte del siguiente desarrollo. Me emocionaron mucho los cuatro primeros avisos que se colocaron a la calle y los droguistas que nos acompañaron a iniciar este sueño”.
Al mirar atrás, no duda en definir estos 17 años con dos palabras: “Orgullo y satisfacción”. Y aunque el camino ha sido retador, asegura que lo más difícil y a la vez lo más valioso ha sido “tener la capacidad de sentir lo que realmente siente el droguista para poder desarrollarle proyectos más acordes a las verdaderas realidades de cada uno de ellos”.
Entre los muchos recuerdos que guarda, hay uno que lo acompaña con especial cariño: “Me acuerdo de una de las más sencillas, ubicada en la carretera a Tunja, donde el señor tenía su droguería en un local muy deteriorado, y algún día pasé y lo vi armando en ladrillo su nuevo local. Me emocioné tanto que, sin pensarlo, me bajé del vehículo de inmediato. Lo abracé con fuerza y juntos nos sumergimos en la construcción de su sueño. Es de las más pequeñas, pero me causa mucho orgullo”.
Enrique encuentra en su padre, ya fallecido, la mayor inspiración. “Siempre hay algo más que hacer, me decía. Hay que mirar para adelante. Sé, porque me lo dijo: estoy muy orgulloso de lo que has logrado. Ya estás caminando solo”. Ese legado se refleja en los valores que han guiado a Droxi: “De parte de nosotros, humildad y la fuerza de inspirar solidaridad para que unidos construyamos algo muy grande. Lo estamos logrando”.
Hoy más de 3.000 droguistas forman parte de la red, y Acuña asegura que “sé que en ellos despierto ilusión, y eso me llena de alegría. Me siento profundamente agradecido de que las personas crean en mí”. Su mensaje para ellos es claro: “Que sientan que hacen parte de un equipo ganador, parte de una de las compañías más grandes de Colombia. Hacia allá vamos, y lo estamos logrando juntos”. Y les recuerda que “nadie dijo que la vida era fácil. “Esto sí ha sido difícil, desde el comienzo hasta ahora, y sabemos que seguirá siendo difícil. Pero no pierdan la esperanza porque los grandes logros se obtienen cuando uno es capaz de vencer las dificultades. Nunca nadie en escenarios de mucha facilidad ha podido construir cosas grandes”.
Lo que diferencia a Droxi de otras redes es su fortaleza humana. “Contamos con personas llenas de esperanza, decididas a construir su propio negocio o cadena. Se sienten acompañadas y confían en que juntos podemos llegar muy lejos. Sin embargo, como en todo camino emprendedor, no todos logran cruzar el río. Muchos lo intentan, pero no todos lo consiguen. Por eso, aspiramos a fortalecer aún más el acompañamiento, para que quienes desean emprender y comenzar su proyecto estén mejor preparados y tengan mayores posibilidades de éxito”, enfatizó Enrique Acuña.
Ese compromiso se proyecta en el futuro: “Estamos ya en 550 municipios. El sueño es estar en todos y cada uno de los municipios del país, llegando especialmente a los estratos de población más necesitados, estratos 1, 2 y 3. Necesitan no solamente droguerías serias, éticas, sino droguerías que acompañen en el bienestar de las comunidades”.
Para quienes hoy dudan en unirse a la red, Acuña tiene un mensaje directo: “Éxito tienen las personas que están preparadas a saber cuándo pasa el bus del triunfo. Ya la persona decidirá”. Y no se olvida de recordar quién está en el centro de todo: “El cliente es el rey. Ellos necesitan resolver sus temas de salud en escenarios de mucha confianza. Y qué bueno que la droguería pueda lograr lo que antaño se lograba, y es que un droguista era una persona muy importante en la comunidad. Muchos de ellos son padrinos de los hijos de sus clientes. Otros se vuelven consejeros. Somos seres sociales, el modernismo nos ha ido aislando, pero el ser humano sigue necesitando esa parte de fraternidad”.
Enrique insiste también en que ser droguista hoy requiere preparación: “Siempre se necesita, dado que el negocio se ha ido profesionalizando mucho, la normatividad ha venido exigiendo más. Prepararse. Esto no es simplemente montar unas estanterías y comprar unos productos. El conocimiento de marca, la recomendación, la atención cercana… todo eso es fundamental. Lo otro es el capital. Muchos arrancan y les faltan los cinco centavos para el peso, decía mi padre. Ahí aspiramos también a poder llegar a acompañar a los droguistas para que tengan la fuerza desde el principio y puedan cruzar el río”.
Al celebrar los 17 años de la red, Acuña deja un mensaje final que resume su filosofía: “Lo que a mí me ha servido más es la importancia de soñar. Cuando uno se mete en el mundo empresario, saber para dónde voy, qué es lo que yo quiero, se vuelve fundamental. Muchas personas andan por la vida sin tener claro a dónde quieren llegar. Si uno se traza metas en el largo plazo, seguro la logra. Hay un dicho que dice, si no sabes para dónde vas, nunca llegarás. Entonces sueñen qué es lo que les gusta y comiencen a dibujar ese sueño en su cabeza. Después viene el ejercicio de la milla extra… Todo se resume en la importancia de soñar, soñar. Esto no es de rutinas, esto es de cumplir un sueño”.
Así, entre recuerdos, desafíos y convicciones, Droxi Colombia S.A.S. celebra 17 años acompañando a los droguistas del país. Una red que nació como un sueño compartido y que hoy se consolida como símbolo de confianza, cercanía y esperanza para miles de familias colombianas.