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En la ceremonia de premiación de la Fundación She Is, que trabaja por implementar proyectos de equidad de género, emprendimiento e innovación social, fueron reconocidos los aportes de mujeres desde la cultura, el deporte, el medio ambiente, la política y los derechos humanos.
Entre ellas, Margarita Correa cofundadora y presidenta de la junta directiva del banco de microfinanzas Bancamía recibió el Premio a una trayectoria profesional por su labor con los microempresarios y mujeres del país. Desde hace trece años, Correa ha formado parte del equipo que lidera este banco que hoy coopera con 1,4 millones de personas, de los cuales el 86 % están en condición de vulnerabilidad, el 44 % vive en el campo y el 56 % son mujeres.
Hablamos con Correa sobre su trayectoria en Bancamía, el enfoque de género que ha tenido el banco y también sobre su trabajo por las mujeres desde la organización Women In Connection y como miembro del Consejo Asesor de Empresarias de Colombia de la Presidencia.
¿Cuál ha sido el recoger de estos trece años que lleva al frente de Bancamía?
Lo más importante que ha sucedido en el banco es que ha logrado impactar la vida de los empresarios y los emprendedores de Colombia de una manera muy importante el banco tiene una misión contribuir al desarrollo económico y social y productivo y sostenible para los empresarios en el país y con esa misión ha logrado impactar a 1,4 millones de empresarios con una cartera de 1,5 billones de pesos.
¿Cómo ha sido el acompañamiento a los microempresarias y mujeres rurales?
El banco se ha empeñado en construir productos y servicios financieros a la medida de las necesidades de los emprendedores: créditos, capacitación en educación financiera, ahorros, seguros, remesas, toda la oferta de productos y servicios que necesitan en todos los puntos de atención que tenemos, en las 800 oficinas y corresponsales bancarios.
Esta es una banca relacional que visita los negocios, visita las empresas, visitan las familias de los emprendedores y esto hace viable que ellos después puedan tener crédito en comercio, en producción, en manufactura, que puedan tener créditos agropecuarios.
¿Y cómo fue ese acompañamiento durante la pandemia y sus efectos económicos sobre esta población?
Durante esta pandemia el banco acompañó de una manera muy especial con un programa de atención a deudores. A cada uno de los emprendedores les hicimos un seguimiento para que no se fuera a quebrar su negocio, para que tuvieran acceso al ingreso solidario por parte del gobierno, para que pudieran asumir a la crisis que les produjo la pandemia. También continuamos dándoles oportunidades para que ellos ajustaran todo lo que necesitaran para que sus negocios salieran adelante.
A raíz de la pandemia y las dificultades de acceso que representó el confinamiento del 2020, ¿cómo acompañaron a los microempresarios?
El banco representa una transformación social económica de desarrollo y en esta etapa el gran salto que dio el banco es el acompañamiento en tecnología, llevando la banca digital.
¿Cómo fue ese proceso de digitalización?
Inició hace tres, cuatro años con ofertas fáciles para que ellos tramiten un crédito, consulten su crédito, con la posibilidad de abrir un CDT, de ahorrar, también con la posibilidad de hacer los trámites digitales y cerrar las brechas digitales, que es más amplia en las mujeres rurales.
Ha sido una gran evolución el desarrollo de la banca virtual que creíamos que tendríamos en futuro lejano, pero que ya es un hecho. Esa ha sido una de las cosas que nos dejó la pandemia, nos llevó a la tecnología y a la digitalización de la banca móvil hoy. Logramos que ellos tengan acceso fácil, sencillo, oportuno, que tengan la posibilidad de encontrar un camino para que sus emprendimientos puedan resurgir.
¿Cómo garantizan el acompañamiento digital a los emprendedores que no cuentan con la tecnología necesaria o no tienen acceso a internet?
Como tenemos una banca relacional y no solo transaccional, llevamos una relación cercana con conocimiento de nuestros clientes y de todas sus necesidades. En el campo, por ejemplo, tenemos ejecutivos que acompañan a los emprendedores en todo su proceso y por el tiempo que duren sus créditos, ellos también son entrenadores que tienen las herramientas y están presencialmente, en las visitas llevan la tablet, les enseñan cómo se hace cómo se hace cada operación; si tienen el teléfono, cómo lo pueden lograr desde el teléfono.
También ofrecemos educación financiera modular, son talleres sencillos con entrenamiento en educación financiera que antes se hacían en cartillas y hoy pueden hacer virtualmente de forma gratuita.
Hay un módulo de formación en educación financiera dedicado al empoderamiento, ¿cuál es la importancia para el banco de potenciar esta característica en los microempresarios?
Hablando desde la perspectiva de género, nosotros le hacemos mucho énfasis a que cuando las personas tienen la posibilidad de desarrollar su actividad productiva, con su flujo de caja pueden ahorrar, invertir, destinar dinero para el bienestar de su familia, y si esa persona es mujer y esos ingresos son constantes, ellas empiezan a ganar en autoconfianza, en autodeterminación, en decidir sobre el destino de sus ingresos, en participar y empoderarse económicamente.
El empoderamiento es poder pensar que con esa actividad económica viene prosperidad, desarrollo, progreso, y mejor si es mujer porque muchas tienen la carga económica de su familia y pasan de no tener recursos a ser estabilizadoras de su hogar.
El empoderamiento es poder pensar que con esa actividad económica viene prosperidad, desarrollo, progreso, y mejor si es mujer porque muchas tienen la carga económica de su familia y pasan de no tener recursos a ser estabilizadoras de su hogar.enen la carga económica de su familia y pasan de no tener recursos a ser estabilizadoras de su hogar.
En cuanto al enfoque para empoderar la economía de las mujeres, ¿qué ofertan para apoyarlas?
El banco se ha empeñado en diseñar productos dirigidos a las mujeres, como el seguro protegido, para mujeres que tienen ventas ambulantes y con ese crédito pueden tener un seguro para protegerlas en caso del robo de su mercancía; también brindamos acompañamiento durante la maternidad con un seguro para mujeres gestantes. Con estos productos acompañamos a las mujeres en el desarrollo productivo de sus empresas.
¿Cuál ha sido su rol como miembro del Consejo Asesor de empresarias de Colombia?
Yo pertenecía a la comisión que acompañaba a los alcaldes, era la madrina del alcalde de Rionegro, Santander y desde allí pudimos acompañar el proyecto de la construcción de la casa de la mujer, fue apoyado por el Concejo Municipal, se destinó una casa para hacer este proyecto y hoy es una realidad.
¿Cuál es el objetivo de ese espacio?
Allí se desarrollan proyectos para acompañar a las mujeres emprendedoras que tengan iniciativa de algunos emprendimientos, se hacen entrenamientos en empoderamiento, talleres, encuentros, asesorías.
¿Qué hace falta para darles más espacios de participación a las mujeres?
Estamos trabajando en diferentes comités de política pública, en Women In Connection cada comité analiza las brechas que hay en política pública en diferentes áreas y buscamos incidir para que esas brechas se cierren, en espacios como acceso a programas de salud, en pensiones, en acceso a crédito a microfinanzas, ahí empezamos a ver dónde podemos contribuir para crear espacios más inclusivos.
