En un momento de profunda tristeza y emoción, Alejandra Guzmán ha compartido sus primeras palabras públicas tras el sensible fallecimiento de Silvia Pinal, una de las actrices más emblemáticas de la época dorada del cine mexicano.
¿Qué dijo Alejandra Guzmán sobre la muerte de Silvia Pinal?
En medio de una conferencia de prensa, la intérprete de Hacer el amor con otro no pudo contener su dolor al recordar a su madre, mostrando la profunda conexión y amor que existía entre ambas. Con la voz entrecortada y lágrimas en los ojos, Alejandra expresó sus sentimientos más íntimos sobre la pérdida de quien fue no solo su madre, sino también un ícono cultural de México.
“Nos quedamos con esa paz, ese regalo tan inmenso de estar en ese momento, es una energía hermosa, impresionante, grande, misericordiosa, ella se fue en paz, como una diva y tenia toda una vida espectacular... Todos llevamos su sangre, su casta, su fortaleza, siempre amó la vida, México, todo el mundo, se merece una Silvia Pinal. Sólo puedo agradecerle a la vida por tener todo lo que nos dejó, abrazó, enseñó, siempre jaló con todos, nos aguantó”, dijo la artista.
¿De qué murió Silvia Pinal?
Silvia Pinal dejó un legado imborrable en el teatro, cine y la televisión mexicana. Compartió créditos con Cantinflas, Tin Tan y Pedro Infante. La noticia de su fallecimiento a los 93 años conmovió al mundo del espectáculo, dejando un vacío importante en la industria audiovisual.
La artista presentó varios quebrantos de salud durante los últimos años. Padeció covid-19, neumonía, e incluso, tuvo llagas en su espalda. En el 2020 tuvo que someterse a una cirugía de cadera luego de haber sufrido una fuerte caída. En los últimos días, estuvo hospitalizada, al parecer, por una infección en las vías urinarias.
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Su familia, en especial su hija Alejandra Guzmán, estuvo a su lado y la cuidó durante sus últimos días. La primera actriz mexicana pasó sus últimos años rodeada de sus seres queridos, con la compañía constante de sus dos hijas. Su fallecimiento fue profundamente sentido en el ámbito artístico mexicano, donde era vista como una auténtica leyenda.
Su carrera artística comenzó en 1949 con El pecado de Laura. De ahí en adelante fueron múltiples las producciones de las que hizo parte, entre ellas, Mujer de medianoche, La marca del zorrillo, Cuando los hijos pecan, Por ellas aunque mal paguen, Divinas palabras, El niño de su mamá, Ya no los hacen como antes, entre otras.
