Estudio publicado por The Lancet explica cómo afecta a la salud el cambio climático
Según el informe, el año pasado 157 millones más de personas estuvieron expuestas a riesgos de salud relacionados con el calor que en 2000. Resalta que los grupos más vulnerables son las personas con enfermedades no transmisibles, personas de la tercera edad y las comunidades urbanitas de Europa y el Mediterráneo oriental.
-Redacción Salud
Un estudio publicado por la revista The Lancet sobre el impacto que tiene el calor extremo derivado del calentamiento global en la salud, muestra que sigue en aumento la proporción de la población que está en riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y renales, derivados por los golpes de calor. Resalta que, a pesar de los esfuerzos de la comunidad internacional, están muy lejos de cumplir los compromisos adquiridos en el Acuerdo de Paris.
Según el informe, el año pasado 157 millones más de personas estuvieron expuestas a riesgos de salud relacionados con el calor que en 2000. Además, resalta que los grupos más vulnerables son las personas con enfermedades no transmisibles, personas de la tercera edad y las comunidades urbanitas de Europa y el Mediterráneo oriental.
Estas poblaciones son más vulnerables que las de África o el sudeste asiático debido al envejecimiento de la población. Según aclara el estudio, "las personas mayores de 65 años y que son vulnerables a la exposición a olas de calor representan el 42 y el 43 % de la población en esas zonas de Europa y el Mediterráneo oriental, respectivamente, frente al 38 y 34 % de África y el sudeste asiático, respectivamente". (Lea: ONU: 2018, en vías de convertirse en uno de los años más cálidos jamás registrados)
Hilary Graham, coautora del estudio e investigadora de la Universidad de York (R. Unido), por medio de un comunicado explica que "las tendencias respecto al impacto del cambio de climático, exposición y vulnerabilidad demuestran que existe un riesgo inaceptable para la salud ahora y en el futuro. La falta de avances para reducir las emisiones pone en peligro las vidas y los sistemas sanitarios".
El estudio resalta que entre las amenazas más grandes está el estrés por el calor, que puede matar a las personas directamente o desencadenarles enfermedades renales y cardiovasculares. Añade que un clima más cálido disminuye la capacidad de la gente para trabajar, ya que el aumento regular de la temperatura supera los límites fisiológicos y el trabajo se hace más difícil o imposible, sobre todo en la agricultura.
De este último ítem, señala que el año pasado se perdieron 153.000 millones de horas de trabajo debido a la exposición a altas temperaturas, es decir, 62.000 millones más que hace casi una década. En cuanto a las poblaciones más vulnerables, The Lancet agrega que el incremento de temperatura se concentra en zonas como India, el sudeste asiático, África subsahariana y Sudamérica.
Aunque el informe destaca la labor que ha emprendido la comunidad internacional para mermar el cambio climático, advierte que aún están lejos de cumplir con los compromisos adquiridos en el Acuerdo de París. Esta semana, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, insistió a los líderes mundiales la importancia de reducir rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero.
El informe anual que presenta la revista fue elaborado por 27 instituciones académicas, que son líderes en este campo. Además, contó con la colaboración de las Naciones Unidas, las agencias intergubernamentales de cada continente y expertos en diferentes disciplinas. Para llegar a estas conclusiones, el equipo analizó 41 indicadores en áreas como el impacto del cambio climático, la exposición y vulnerabilidad; la adaptación, planificación y resistencia de la salud; las acciones de mitigación y cobeneficios de salud; y las finanzas y economía. (Puede leer: ONU: La pérdida de biodiversidad es un "asesino silencioso" sin marcha atrás)
Un estudio publicado por la revista The Lancet sobre el impacto que tiene el calor extremo derivado del calentamiento global en la salud, muestra que sigue en aumento la proporción de la población que está en riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y renales, derivados por los golpes de calor. Resalta que, a pesar de los esfuerzos de la comunidad internacional, están muy lejos de cumplir los compromisos adquiridos en el Acuerdo de Paris.
Según el informe, el año pasado 157 millones más de personas estuvieron expuestas a riesgos de salud relacionados con el calor que en 2000. Además, resalta que los grupos más vulnerables son las personas con enfermedades no transmisibles, personas de la tercera edad y las comunidades urbanitas de Europa y el Mediterráneo oriental.
Estas poblaciones son más vulnerables que las de África o el sudeste asiático debido al envejecimiento de la población. Según aclara el estudio, "las personas mayores de 65 años y que son vulnerables a la exposición a olas de calor representan el 42 y el 43 % de la población en esas zonas de Europa y el Mediterráneo oriental, respectivamente, frente al 38 y 34 % de África y el sudeste asiático, respectivamente". (Lea: ONU: 2018, en vías de convertirse en uno de los años más cálidos jamás registrados)
Hilary Graham, coautora del estudio e investigadora de la Universidad de York (R. Unido), por medio de un comunicado explica que "las tendencias respecto al impacto del cambio de climático, exposición y vulnerabilidad demuestran que existe un riesgo inaceptable para la salud ahora y en el futuro. La falta de avances para reducir las emisiones pone en peligro las vidas y los sistemas sanitarios".
El estudio resalta que entre las amenazas más grandes está el estrés por el calor, que puede matar a las personas directamente o desencadenarles enfermedades renales y cardiovasculares. Añade que un clima más cálido disminuye la capacidad de la gente para trabajar, ya que el aumento regular de la temperatura supera los límites fisiológicos y el trabajo se hace más difícil o imposible, sobre todo en la agricultura.
De este último ítem, señala que el año pasado se perdieron 153.000 millones de horas de trabajo debido a la exposición a altas temperaturas, es decir, 62.000 millones más que hace casi una década. En cuanto a las poblaciones más vulnerables, The Lancet agrega que el incremento de temperatura se concentra en zonas como India, el sudeste asiático, África subsahariana y Sudamérica.
Aunque el informe destaca la labor que ha emprendido la comunidad internacional para mermar el cambio climático, advierte que aún están lejos de cumplir con los compromisos adquiridos en el Acuerdo de París. Esta semana, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, insistió a los líderes mundiales la importancia de reducir rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero.
El informe anual que presenta la revista fue elaborado por 27 instituciones académicas, que son líderes en este campo. Además, contó con la colaboración de las Naciones Unidas, las agencias intergubernamentales de cada continente y expertos en diferentes disciplinas. Para llegar a estas conclusiones, el equipo analizó 41 indicadores en áreas como el impacto del cambio climático, la exposición y vulnerabilidad; la adaptación, planificación y resistencia de la salud; las acciones de mitigación y cobeneficios de salud; y las finanzas y economía. (Puede leer: ONU: La pérdida de biodiversidad es un "asesino silencioso" sin marcha atrás)