Cada vez es más común que las personas complementen su experiencia de tener un teléfono inteligente con un reloj, también inteligente, llamado comúnmente smartwatch. Un dispositivo de estas características está dotado de funciones asociadas al acceso a internet.
Es funcional siempre y cuando este conectado, casi siempre por medio de Bluetooth, a un celular y pueda mantener una comunicación constante con este. En la actualidad hay una amplia gama de marcas que ofrecen un smartwatch para cada necesidad e increíblemente compatibles con todas las funciones de un smartphone de la misma empresa.
Frecuentemente, aunque no es su única funcionalidad, los smartwatch son utilizados como compañeros de entrenamiento físico. Sea para correr, ir al gimnasio o montar bicicleta, su capacidad para medir la temperatura corporal, los pasos, el ritmo cardiaco y demás datos los hacen imprescindibles para los entusiastas del deporte.
Incluso, todo esto de lo que es capaz un artefacto como este se puede trasladar a más situaciones de la vida como dormir. Algunos modelos de algunas compañías pueden identificar las fases del sueño y monitorear el tiempo de descanso para dar un reporte en cuanto el usuario se despierte, además señalar el posible ánimo de la persona durante el día.
Sin embargo, esto implica tener el smartwatch puesto durante las 24 horas del día, incluso durante la ducha, pues algunos son resistentes al agua y permiten nadar con ellos hasta a 40 metros de profundidad. Pero ¿Qué tan bueno es tener el smartwatch puesto todo el día? ¿Es malo dormir con el smartwatch puesto? Esto es lo que dicen los expertos.
¿Dormir con el smartwatch puesto implica un riesgo a la salud humana?
Comencemos por decir que dormir con un reloj inteligente no es automáticamente malo, pero puede afectar negativamente la calidad del sueño de algunas personas. Si bien no acarrea daño físico directo, el uso de un smartwatch a la hora de dormir puede ocasionar interrupciones.
Las notificaciones, las vibraciones o la luz puede ayudar a provocar un estrés tecnológico y una dependencia del dispositivo sea para descansar o estar pendiente del celular, incluso durante las horas de sueño. Además, el uso prolongado puede causar irritación leve o grave en la piel del usuario, esto dependerá de cada persona, debido a la fricción y el sudor.
Algunos de estos inconvenientes pueden solucionarse con ajustes que limiten o eliminen por completo las notificaciones, vibraciones y la luz del reloj. Adicionalmente, también se pueden considerar otras opciones como un anillo inteligente para seguir monitoreando el sueño sin que implique tener un reloj puesto durante toda la noche.
Algunos riesgos del smartwatch
Sin embargo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dicho que la exposición a dispositivos electrónicos como relojes inteligentes o teléfonos móviles, entre otros, pueden reducir los niveles de melatonina, lo que afecta de forma negativa la calidad del sueño.
¿Por qué ocurre esto? Al ser tecnologías que funcionan inalámbricamente, trabajan y se comunican con otros dispositivos, como celulares, a través de pequeñas señales de radiación electromagnética. Estás en pequeñas cantidades, como las que emite un smartwatch, si bien no son perjudiciales para la salud, según la OMS, tampoco es recomendable estar expuestas a ellas permanentemente.
Volviendo a la melatonina, esta hormona es la encargada de regular los ciclos de sueño y vigilia que ponen a descansar o en alerta al cuerpo. Si este proceso se afecta artificialmente, pueden alterar negativamente la capacidad de descanso de un ser humano.
Dormir o no dormir con el smartwatch, ahí está el detalle
De acuerdo con un informe de la National Sleep Foundation, la exposición a tecnología, incluso pasiva, como un smartwatch, puede generar microdespertares, interrumpiendo el ciclo natural del sueño. Incluso si el dispositivo tiene algunas funciones limitadas o apagadas.
Por último, algunos materiales con los que están fabricados los smartwatch pueden generar alergia en algunas personas. Sin contar que tampoco es del todo bueno tener una de las muñecas cubiertas todo el tiempo, pues es una zona que necesita recibir sol, agua e higiene.
En conclusión, la decisión de usar o no el reloj inteligente durante todo el día es una decisión del usuario, también mediada por las funciones que brinde el dispositivo. Eso sí, nunca sobran las recomendaciones y conocer los riesgos que implica estar permanentemente conectado con nuestros aparatos inteligentes.