
Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Mattel es una multinacional estadounidense dedicada a la fabricación y distribución de juguetes. Desde 1945 produce algunos de los juguetes más populares del mundo como los carros de Hot Wheels, la figura de acción de Max Steel y por supuesto la muñeca Barbie. Se trata de la tercera mayor compañía de juguetes en el mundo, solo por detrás de Lego y Bandai Namco.
Sin duda Barbie ha sido la cara de Mattel ante el mundo. Se le considera, a excepción de quienes la acusan de perpetuar los estereotipos de la belleza femenina, como el personaje más influyente en esta industria desde su creación el 9 de marzo de 1959, por Ruth Handler. Sin embargo, durante este siglo había perdido su dominio contra las princesas de Disney, hasta que se estrenó su película en 2023.
La cinta protagonizada por Margot Robbie fue la más taquillera de ese año, recaudando casi 1.500 millones de dólares, pero más importante, le dio una bocanada de oxígeno a la imagen de Barbie frente al mundo. Reactivó la venta de las muñecas y volvió a posicionarla como un juguete para pequeños y grandes.
Toda esta historia nos lleva a OpenAI, otra multinacional estadounidense dedicada a la investigación y la ejecución de modelos de inteligencia artificial (IA) desde 2015. Fundada por el billonario sudafricano Elon Musk, su servicio más conocido es ChatGPT, un chatbot que comenzó a tomar popularidad a partir de 2022.
Ahora esa misma empresa ha puesto sus ojos en Mattel y Barbie para crear la primera muñeca con IA. Ambas compañías ya cerraron un acuerdo y se preparan para comenzar con el desarrollo del nuevo juguete. Se espera que esto le abra la puerta del mercado juguetero a más productos potenciados con este tipo de tecnología.
Barbie con IA
Según Bloomberg, Brad Lightcap, jefe de operaciones de OpenAI y Josh Silverman, jefe de franquicias de Mattel, hablaron sobre algunas de las posibilidades de esta nueva alianza, entre las que destaca la creación de compañeros digitales basados en personajes de Mattel.
Otra idea sobre la mesa es la posibilidad de hacer “más interactivos” juegos de mesa como el “Uno”, también propiedad de Mattel. Incluso expandiendo todas esas nuevas posibilidades a otros juguetes emblemáticos como las Polly Pockets.
Se espera que para finales de este año, tanto OpenAI como la empresa juguetera, den más detalles sobre la dirección hacia la que camina su nuevo convenio. Cabe recordar que ambas multinacionales llevan conversando desde finales de 2024.
La controversia por la IA en los juguetes
No obstante, el anuncio no estuvo exento de polémicas y críticas de parte de quienes cuestionan la conveniencia de poner IA a disposición de los niños y niñas, los mayores consumidores de juguetes en el mundo. Más allá de que hoy veamos a muchos adultos comprando y armando sets de Lego.
Muchos acusan a OpenAI y otros creadores de modelos de inteligencia artificial de usar esta tecnología indiscriminadamente sin contemplar sus repercusiones. Además, sin contar con los posibles efectos negativos que tenga dejar a un menor de edad en compañía de una IA mientras “juega” con ella.
Por su parte, la compañía de Musk sigue tratando de ganar terreno en varias industrias, especialmente aquellas ya consolidadas con franquicias tremendamente exitosas. Como es el caso de Barbie, quien lleva comercializando muñecas, con cifras multimillonarias, hace más de 65 años.
Inteligencia artificial hasta en la sopa
Hay otras voces que hablan de una estrategia de compañías como OpenAI y su homóloga chino, DeepSeek, para entrar de lleno a la industria del entretenimiento. Todo esto con el fin de aprender de los patrones de consumo de los usuarios y así, en un tiempo, poder predecir sus decisiones de compra.
Los mejores ejemplos son Netflix, YouTube y Spotify, plataformas que utilizan algoritmos con IA para recomendar o desestimar contenido para una persona. Una práctica que no es nueva, pero ahora está potenciada por estos modelos tecnológicos.
Habrá que esperar si el trato entre Mattel y una de las empresas de Elon Musk madura y se convierte en una realidad. Ya existe la Barbie en silla de ruedas y la Barbie con prótesis, pero aún falta tiempo para ver la Barbie con inteligencia artificial.