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El Reino Unido no permitirá la participación de Huawei Technologies Co. en “infraestructura nacional crítica”, dijo la secretaria de Cultura, Nicky Morgan, mientras el gobierno evalúa si la compañía china puede desempeñar un papel en el desarrollo de las redes de telecomunicaciones 5G del país.
Una decisión final se dará a conocer más adelante este mes, de acuerdo con dos funcionarios familiarizados con el asunto, que pidieron mantener su anonimato.
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Los comentarios de Morgan a Bloomberg son su señal más fuerte hasta el momento de que Huawei será excluido de las partes más sensibles de las redes de telecomunicaciones 5G del Reino Unido, aunque el término también podría hacer referencia a una gama más amplia de activos, como plantas de energía y servicios de emergencia. El primer ministro, Boris Johnson, insinuó esta semana que está preparando terreno para permitir que Huawei suministre al menos algunos equipos para las redes de banda ancha de próxima generación, incluso ante la fuerte presión de prohibición por parte de EE.UU.
“Solo quiero dejarlo muy claro, Huawei no participará en nuestra infraestructura nacional de nivel crítico”, dijo Morgan el miércoles a Bloomberg Television. “La seguridad nacional y la seguridad de dicha infraestructura será absolutamente primordial cuando el gobierno tome esa decisión”.
Buscar el equilibrio
El Reino Unido debe equilibrar las solicitudes de sus aliados, especialmente EE.UU., que dice que permitir que la empresa china se involucre en redes 5G presenta un riesgo de seguridad, con sus prioridades internas de acelerar el despliegue de la banda ancha más rápida.
“Tanto la red 5G como su despliegue son muy importantes, en términos de alentar a tecnológicas a establecerse aquí, por lo que hay varios factores diferentes a evaluar para tomar esa decisión”, dijo Morgan. “Huawei ya tiene una parte en nuestras redes 4G y 5G”.
También señaló que el Reino Unido depende de relativamente pocos proveedores de telecomunicaciones.
“La diversificación de los proveedores de 5G, personas que abastecen a las redes, es absolutamente una preocupación y no solo de interés para el Reino Unido, sino también para los países de todo el mundo que buscan expandir sus redes 5G”, comentó Morgan anteriormente en Bloomberg Radio.
Seguridad nacional
Morgan dijo que el Consejo de Seguridad Nacional del Reino Unido discutirá la cuestión de Huawei y que la decisión del gobierno será una responsabilidad colectiva de todos los ministros. Ha habido informes de que la ministra de Interior, Priti Patel, se encuentra entre los ministros que se oponen a permitir que Huawei desempeñe algún rol.
La llamada red 5G, que significa tecnología inalámbrica de quinta generación, promete velocidades hasta 100 veces más rápidas que las redes 4G actuales, lo que podría desbloquear nuevas tecnologías, como fábricas automatizadas.
Altos funcionarios estadounidenses visitaron Londres el lunes para instar al Reino Unido a prohibir completamente las redes 5G de Huawei, por preocupaciones de que cualquier participación podría abrir la puerta a espías chinos. Funcionarios estadounidenses advirtieron que el intercambio de inteligencia en el futuro podría estar en riesgo si Gran Bretaña no prohibiera el acceso de la compañía.
Amigos y aliados
Morgan dijo que el gobierno será consciente de las opiniones de sus socios de intercambio de inteligencia, que comprende a EE.UU., Canadá, Australia, Nueva Zelanda, al momento de tomar su decisión.
Un funcionario del Reino Unido dijo que el cabildeo público del gobierno de EE.UU. para una prohibición había sido contraproducente para los estadounidenses, porque le dificultaba a Johnson cambiar de táctica sin parecer que se inclinaba ante la presión del presidente Trump.
Partidarios de Huawei sostienen que el equipo de la compañía se puede usar en áreas no centrales de una manera que mantenga seguras las redes. Pero EE.UU. advierte que los efectos del paso a la tecnología 5G son tan poco conocidos que la mejor solución, y la más segura, es mantener a la compañía china totalmente fuera. Huawei niega que represente un riesgo de espionaje.