Ubisoft Entertainment es una empresa desarrolladora de videojuegos fundada el 28 de marzo de 1986 por la familia Guillemot en Francia. Algunas de sus IP’s (propiedades intelectuales) más reconocidas son Tom Clancy’s, Prince of Persia, Far Cry, Assassin’s Creed, Just Dance, Watch Dogs, The Crew, entre otras.
Para 1995, Ubisoft había producido algunos juegos con éxito moderado en Europa, pero con el desarrollo de Rayman para las consolas de quinta generación, especialmente la PlayStation 1, la fama se expandió a todo el mundo. Consecuencia que perdura hasta hoy y mantiene a la compañía francesa como el mayor creador de videojuegos en Europa.
A partir de allí, su influencia siguió creciendo, lo que le permitió abrir estudios nuevos en otras ciudades del mundo; tan cercanos como Barcelona, España o tan lejanos como Shanghái, China. Todo esto con la intención de desarrollar títulos con la ayuda de programadores que entendieran el mercado de cada país y trabajaran con base en eso.
Durante el siglo XXI, Ubisoft ya era una multinacional consolidada en el mundo del Gaming y desde entonces lucha contra Electronic Arts (EA) por ser el mayor distribuidor de videojuegos third-party del mundo. No obstante, los recientes escándalos por acoso sexual, laboral y racismo al interior del estudio y por parte de algunos exdirectivos le está complicando el ascenso a la cima.
¿De qué acusan a los exdirectores de Ubisoft?
En junio de 2020 ya habían aparecido las primeras acusaciones públicas sobre acoso y agresión sexual en contra de algunas empleadas. En ese entonces fueron al menos 20 mujeres las que dieron un testimonio a las autoridades francesas sobre lo que pasaba con ellas al interior de la empresa.
Según un reporte hecho por Liberation, un periódico galo, eran cientos de casos de ambiente hostil y sexista dentro de Ubisoft. En la mayoría de las oportunidades demostrado a través de abusos de poder, acoso, misoginia y homofobia.
De acuerdo con este diario, Serge Hascoët, director creativo retirado de ese cargo por agresión sexual, presuntamente drogó sin consentimiento en repetidas ocasiones a otros compañeros y los había presionado para que bebieran alcohol. Todo esto conforme a la declaración de una empleada.
¿Qué dijo Ubisoft sobre estas acusaciones?
Inmediatamente, la compañía dijo públicamente que comenzarían una investigación interna y casi que al mismo tiempo Hascoët, Tannis Mallat, presidente de Ubisoft Canadá y Cécile Cornet, la responsable global de Recursos Humanos, entre otros dimitieron de sus cargos.
Sin embargo, estas acciones fueron consideradas tardías, pues antes de la publicación de Liberation, se conoció que muchos directivos sabían de los abusos y guardaron silencio. Conforme al testimonio de otra empleada, quienes hablaban del tema eran tachados como a quienes debían ignorar a toda costa.
El periodista Jason Schreier señaló en un artículo que hizo con la ayuda de casi 40 entrevistas a empleadas, que si bien Ubisoft atendió algunos casos, en la mayoría fueron “... ignoradas, mal gestionadas o menoscabadas”.
En el texto de Schreier muchos trabajadores acusaron a Hascoët de permitir un mal comportamiento en el departamento de redacción, donde la mayoría de miembros eran hombres. Algunos afirmaron haber visto videos pornográficos en los computadores de la oficina, comidas con alcohol y una serie de bromas inapropiadas.
Propuestas sexuales y tocamiento de genitales
Cinco de los denunciantes aseguraron que Tommy François, jefe de redacción, les hacía proposiciones sexuales y tocamiento de genitales. Esto se lo comentaron inicialmente al departamento de Recursos Humanos en varios momentos durante la última década.
“El personal hacía abiertamente comentarios misóginos o racistas en las distintas oficinas de la editorial, y los altos ejecutivos participaban e intensificaban la mala conducta en forma de tocamientos inapropiados u otras insinuaciones sexuales, según afirman empleados actuales y antiguos”, escribió Jason Schreier en su nota.
Ya en 2021, el sindicato francés Solidaires Informatique interpuso una demanda formal en contra de Ubisoft por “acoso sexual institucional“. Además, también salió a la luz pública que el estudio en Singapur estaba siendo investigado por las mismas razones.
Las denuncias no fueron escuchadas a tiempo
A finales de ese mismo año, los empleados de la compañía denunciaron en redes que ninguno de sus testimonios fueron atendidos. En lugar de eso, la empresa ascendía o trasladaba a los agresores, pero no se les investigaba su historial de reincidencias.
Una cuarta parte de los que firmaron esa denuncia ya habían dejado sus cargos en la multinacional. Sin mencionar que una encuesta interna revelaba que uno de cada cuatro colaboradores en Ubisoft habían sufrido o presenciado malas conductas de parte de sus jefes.
No fue hasta 2023 que cinco de los acusados fueron puestos en arresto por la justicia francesa. Tommy François, Serge Hascoët y Guillaume Patrux fueron llamados a declarar por acoso sexual, intimidación e intento de agresión sexual mientras trabajaron en la compañía.
Condenas para algunos exdirectivos de Ubisoft
En el juicio se conoció que algunas de las víctimas fueron amarradas a sus sillas, objeto de comentarios sexuales, sobre sus cuerpos, besos y masajes no solicitados. Según el medio de comunicación inglés, The Guardian, estas acusaciones se repitieron en casi todas las declaraciones de las víctimas.
Muchas de las empleadas maltratadas le informaron lo sucedido a Recursos Humanos quienes les respondieron que “no le dieran importancia”. Tommy François, uno de los acusados, negó todas las acusaciones y justificó los actos diciendo: “es la cultura de Ubisoft. Hay que ser divertido para crear diversión“, declaró François.
Le Monde, un prestigioso periódico galo, publicó que muchos de los denunciantes se sintieron decepcionados al no ver a muchos de los responsables sentados en el banquillo de los acusados, además de que Ubisoft como empresa no haya sido procesada.
Finalmente, este lunes 7 de julio de 2025 Tommy François; exvicepresidente de servicios editoriales y creativos, Serge Hascoët; exdirector creativo y Guillaume Patrux exdiseñador de videojuegos fueron declarados culpables. François condenado a tres años de prisión no inmediata y una multa de 30.000 euros, Hascoët condenados a un año y medio de prisión no inmediata y una multa de 45.000 euros y Patrux un año de prisión no inmediata y una multa de 10.00 euros. Todos fueron retirados de sus cargos en 2020.