Unos 1.400 millones de chinos dijeron adiós al año del dragón y dieron desde anoche la bienvenida al año de la serpiente, que simboliza la sabiduría o la buena fortuna en el zodíaco tradicional y que comienza hoy con celebraciones familiares en todo el país.
Este 2025 es el turno de la serpiente de madera, un símbolo relacionado con el encanto, la inteligencia y la creatividad, aunque también con el secretismo o la astucia.
Pese a su mala fama en Occidente, para los chinos la serpiente es un símbolo sagrado: una leyenda tradicional china cuenta que Nüwa y Fuxi, que tenían cabezas humanas pero cuerpos de serpiente, fueron los creadores de la humanidad. Y, además, el símbolo está relacionado con el mitológico dragón tanto que su nombre en el zodíaco es precisamente “pequeño dragón”.
La celebración comienza con la cena de la ‘Nochevieja china’, con los famosos ‘jiaozi’ (empanadillas al vapor) como estrella, y la famosa gala anual retransmitida por la televisión estatal CCTV, donde el protagonismo este año se lo llevaron unos robots humanoides que se han hecho virales en redes tras ejecutar un baile regional.
La tradición llama a quedarse despierto hasta la medianoche y lanzar petardos y fuegos artificiales para ahuyentar malos espíritus. No obstante, en algunas zonas de las grandes urbes ya no se pueden escuchar porque fueron prohibidos por cuestiones de seguridad y para evitar una mayor contaminación atmosférica.
Tras ello, este primer día del año lunar suele destinarse a visitar a familiares para entregarles los populares ‘hongbao’, sobres de color rojo con dinero dentro que se utilizan para desear fortuna. Y, para los más religiosos, es un momento ideal para acudir a los templos y orar.
En China son ocho días festivos por el Festival de la Primavera de 2025, un período tradicional para viajar, por lo que las estaciones ferroviarias están colmadas de personas que visitan a sus familias, una movilización que este año podría marcar un récord.
Las calles, centros comerciales, edificios de oficinas y casas se engalanan con banderolas rojas, que se cree que ahuyentan el mal, en gran parte del este y sudeste de Asia, como Corea del Sur, Singapur, Vietnam y Tailandia.
La mañana del miércoles en Taiwán, personas de todas las edades acudían a los templos de la isla con ofrendas de frutas, dulces, galletas y nueces para meditar y orar.
“Nuestra tradición es visitar el templo y orar por la buena fortuna este año”, explicó Chen Ching-yuan, de 36 años, en el templo Longshan de Taipéi al que acudió con su madre. Algunos visitantes de los templos recibieron el nuevo año quemando incienso para tener buena fortuna.
Lin Yu-soon, de 73 años, llegó con su familia al templo. ”El primer día del año lunar visitamos el templo y hacemos una pequeña excursión. Es todo. Venir aquí nos reconforta espiritualmente mientras rezamos”, indicó Lin a la AFP.
En el tradicional período de 40 días antes, durante y después del Año Nuevo Lunar en China continental, se prevén unos 9.000 millones de viajes interprovinciales en todos los medios de transporte. Esa movilización por tren y avión deberá alcanzar “niveles récord” este año, según la agencia noticiosa estatal Xinhua.
En Corea del Sur, las fuertes nevadas interrumpieron los viajes por tren, bus y avión en todo el país, cuando las personas se trasladaban a visitar a sus familias. En la principal estación de Seúl se veían los pasajeros con regalos y valijas en espera de salir de la capital.
Pero imágenes divulgadas por medios locales mostraron vehículos cubiertos de nieve en carreteras paralizadas por las fuertes ventiscas y nevadas.
Las autoridades advirtieron que podría tomar más de siete horas para ir de Seúl a la ciudad portuaria de Busán, un trayecto que habitualmente se alarga unas cuatro horas.
Otros optaron por aprovechar el feriado para viajar al exterior. El operador del Aeropuerto Internacional de Incheon anunció que más de 2,1 millones de pasajeros utilizarían esa terminal para salir de Corea del Sur del 24 de enero al 2 de febrero.
"Está proyectado que será el promedio diario de pasajeros más alto para un Año Nuevo Lunar desde que abrió el aeropuerto" en 2001, dijo el operador en un comunicado.
Incluso los astronautas chinos Cai Xuzhe, Song Lingdong y Wang Haoze enviaron saludos el martes desde la estación espacial Tiangong. En un video divulgado por la Agencia Espacial Tripulada de China, los tres aparecen sosteniendo figuras de papel con el caracter chino “fu”, de buena suerte.
“En el nuevo año, que todos sus sueños se hagan realidad”, dijo Wang, formando un corazón con sus manos.