El sabor de los hoteles
De la mano de chefs de renombre, que sorprenden con creativas propuestas, los restaurantes empiezan a marcar las dinámicas gastronómicas de las ciudades y a convertirse en una referencia para turistas y locales. En Bogotá y Cartagena esta tendencia cobra cada vez más fuerza.
El Espectador
La fusión de los fogones colombianos
Reconocida por su arduo trabajo en la preservación del patrimonio cultural de la gastronomía colombiana, Leonor Espinosa fue elegida por el B.O.G. Hotel para encarnar el reto de concebir un restaurante contemporáneo, único, lleno de vida y pasión, que interpretará la riqueza colombiana desde su cocina.
Como lo explica su gerente, Juan Carlos Galindo, “el restaurante La Leo, Cocina Mestiza, que ocupa el primer piso del hotel, ofrece a los visitantes una experiencia inolvidable que nos llena a los colombianos de orgullo mestizo”.
La idea es que no sólo los huéspedes disfruten de La Leo, sino que el hotel se integre a la ciudad y sea un espacio donde la gente venga a tomarse un café, compartir unos tragos con sus amigos, cerrar negocios, y en el mejor de los casos se convierta en el sitio perfecto para la prerrumba del fin de semana.
En su menú, La Leo presenta dos novedosas alternativas. La primera, una carta de desayunos que rinde culto a los artesanos culinarios del país y sus recetas tradicionales, combinando el mestizaje gastronómico originado por la llegada de los españoles y el gran aporte de la cocina negra. Un ejemplo son las frituras, como carimañolas, arepitas de huevo, minitamales y patacones. La segunda, un menú para almuerzo y cena que recrea los aportes de las diferentes culturas del mundo a las cocinas regionales.
Para completar la propuesta la sommelière Laura Hernández Espinoza, usando el menú de su madre como inspiración, fue la encargada de crear una carta fresca y completa, con vinos de alta calidad provenientes de bodegas prestigiosas de los cinco continentes.
La esencia de la comida española en Cartagena
Enmarcado por una vista privilegiada al mar Caribe y la Ciénaga de la Virgen se encuentra el restaurante Erre, de Ramón Freixa, en el último piso del hotel Las Américas. Un toque de distinción y buen gusto es lo que perciben los visitantes que deciden vivir una experiencia gastronómica exclusiva y placentera, creada por el chef español aclamado mundialmente, y cuyo restaurante en Madrid ha sido reconocido con dos estrellas Michelin.
Erre ofrece tres tipos de cartas en tres ambientes diferentes. El primero es de tapas, donde los comensales encuentran una variada selección de bocados exquisitos, cocteles y vinos en un ambiente casual. El bistronómico tiene una oferta de carnes y pescados con sus respectivos acompañamientos, en donde la parrilla, la brasa y el carbón cobran un especial protagonismo, al igual que los ingredientes españoles.
Por último, el gourmet es la zona más exclusiva de Erre, donde se disfrutan platos de un menú degustación de 34 pasos que Freixa llama “experiencias gastronómicas”. Víctor Fernández, jefe de cocina del restaurante, explica que “esta es una carta con bases españolas, pero la idea es ir fusionándonos poco a poco con la colombiana y latinoamericana, pero siempre manteniendo la esencia de la cocina tradicional”.
Fernández también asegura que Colombia entra cada vez más en la tendencia europea de los viajes exclusivamente gastronómicos, en los que las personas aprovechan sus vacaciones para ir comiendo de restaurante en restaurante, degustando diferentes sabores y explorando nuevas posibilidades.
La fusión de los fogones colombianos
Reconocida por su arduo trabajo en la preservación del patrimonio cultural de la gastronomía colombiana, Leonor Espinosa fue elegida por el B.O.G. Hotel para encarnar el reto de concebir un restaurante contemporáneo, único, lleno de vida y pasión, que interpretará la riqueza colombiana desde su cocina.
Como lo explica su gerente, Juan Carlos Galindo, “el restaurante La Leo, Cocina Mestiza, que ocupa el primer piso del hotel, ofrece a los visitantes una experiencia inolvidable que nos llena a los colombianos de orgullo mestizo”.
La idea es que no sólo los huéspedes disfruten de La Leo, sino que el hotel se integre a la ciudad y sea un espacio donde la gente venga a tomarse un café, compartir unos tragos con sus amigos, cerrar negocios, y en el mejor de los casos se convierta en el sitio perfecto para la prerrumba del fin de semana.
En su menú, La Leo presenta dos novedosas alternativas. La primera, una carta de desayunos que rinde culto a los artesanos culinarios del país y sus recetas tradicionales, combinando el mestizaje gastronómico originado por la llegada de los españoles y el gran aporte de la cocina negra. Un ejemplo son las frituras, como carimañolas, arepitas de huevo, minitamales y patacones. La segunda, un menú para almuerzo y cena que recrea los aportes de las diferentes culturas del mundo a las cocinas regionales.
Para completar la propuesta la sommelière Laura Hernández Espinoza, usando el menú de su madre como inspiración, fue la encargada de crear una carta fresca y completa, con vinos de alta calidad provenientes de bodegas prestigiosas de los cinco continentes.
La esencia de la comida española en Cartagena
Enmarcado por una vista privilegiada al mar Caribe y la Ciénaga de la Virgen se encuentra el restaurante Erre, de Ramón Freixa, en el último piso del hotel Las Américas. Un toque de distinción y buen gusto es lo que perciben los visitantes que deciden vivir una experiencia gastronómica exclusiva y placentera, creada por el chef español aclamado mundialmente, y cuyo restaurante en Madrid ha sido reconocido con dos estrellas Michelin.
Erre ofrece tres tipos de cartas en tres ambientes diferentes. El primero es de tapas, donde los comensales encuentran una variada selección de bocados exquisitos, cocteles y vinos en un ambiente casual. El bistronómico tiene una oferta de carnes y pescados con sus respectivos acompañamientos, en donde la parrilla, la brasa y el carbón cobran un especial protagonismo, al igual que los ingredientes españoles.
Por último, el gourmet es la zona más exclusiva de Erre, donde se disfrutan platos de un menú degustación de 34 pasos que Freixa llama “experiencias gastronómicas”. Víctor Fernández, jefe de cocina del restaurante, explica que “esta es una carta con bases españolas, pero la idea es ir fusionándonos poco a poco con la colombiana y latinoamericana, pero siempre manteniendo la esencia de la cocina tradicional”.
Fernández también asegura que Colombia entra cada vez más en la tendencia europea de los viajes exclusivamente gastronómicos, en los que las personas aprovechan sus vacaciones para ir comiendo de restaurante en restaurante, degustando diferentes sabores y explorando nuevas posibilidades.