Las vacaciones no solo son una oportunidad para descansar, sino también una ocasión perfecta para conocer nuevos destinos, disfrutar de diferentes culturas y descubrir rincones inesperados del país. Muchos viajeros desconocen que existe una forma más económica y tranquila de hacerlo: viajando durante la temporada baja.
¿Qué es la temporada baja?
Se conoce como temporada baja al periodo del año en el que disminuye la demanda turística. Esto suele coincidir con el calendario escolar y laboral, cuando la mayoría de las personas están en clases o trabajando, excluyendo feriados y fechas festivas. Durante este tiempo, los destinos reciben menos visitantes, lo cual representa ventajas tanto para el viajero como para las economías locales.
Entre las principales ventajas de viajar en temporada baja están:
- Menores costos en tiquetes, alojamiento y actividades.
- Menos aglomeraciones en sitios turísticos.
- Atención más personalizada en servicios turísticos.
- Mayor disponibilidad de hospedajes y reservas.
¿Cuándo es temporada baja en Colombia?
En términos generales, la temporada baja en Colombia se divide en dos grandes periodos:
- Primera temporada baja: del 14 de enero al 14 de junio.Importante: evitar Semana Santa, pues aunque cae dentro de estas fechas, es considerada temporada alta.
- Segunda temporada baja: del 15 de agosto al 14 de diciembre.Recomendación: tener en cuenta la semana de receso escolar en octubre, cuando los precios pueden elevarse considerablemente.
Es importante considerar las particularidades regionales al momento de planificar, por ejemplo, en la región Caribe aunque el clima seco y soleado en esta zona va de diciembre a abril y en julio y agosto, la temporada baja en términos turísticos coincide con la temporada de lluvias, que ocurre entre mayo y junio, y nuevamente en octubre y noviembre. Esto puede influir en las actividades al aire libre, por lo que conviene planear según las condiciones climáticas locales.
Recomendaciones para viajar en temporada baja
Planificación
- Investigar el destino: conocer el clima, festividades locales, ferias o eventos especiales que puedan coincidir con el viaje.
- Reservar con anticipación: aunque los precios suelen ser más bajos, reservar alojamiento y transporte con tiempo puede evitar imprevistos, especialmente en destinos populares.
- Ser flexible: algunos servicios turísticos pueden operar con horarios reducidos o cierres temporales. Adaptar el itinerario es clave para aprovechar al máximo el viaje.
Ahorro inteligente
- Comparar precios: revisar diversas plataformas de viajes, aerolíneas y agencias para encontrar promociones y descuentos.
- Aprovechar el transporte público: una alternativa económica y eficiente en muchas ciudades.
- Cocinar o comprar local: preparar algunas comidas en el alojamiento o comprar en mercados locales ayuda a reducir gastos.
Consejos prácticos para optimizar su viaje
- Elegir bien el destino: definir un lugar claro según el presupuesto y los intereses facilita la organización y búsqueda de información relevante.
- Establecer un presupuesto realista: tener claro cuánto se puede invertir en hospedaje, transporte, alimentación, actividades y emergencias.
- Buscar eventos fuera de temporada alta: muchos destinos tienen fiestas tradicionales y ferias interesantes durante el año que no coinciden con los periodos más concurridos.
- Explorar lugares novedosos: Colombia ofrece una enorme diversidad de destinos poco explorados. Desde La Guajira hasta el Amazonas, hay parques naturales, pueblos patrimoniales, selvas y llanuras por descubrir, muchas veces a costos más bajos.
- Optar por hospedajes alternativos: hostales, casas rurales o alojamientos turísticos pueden ser más económicos que los hoteles tradicionales y ofrecen experiencias auténticas.
- Considerar paquetes todo incluido: pueden representar un ahorro adicional, especialmente si se contratan con anticipación y durante temporada baja.
- Usar la tecnología a favor: existen aplicaciones y sitios web para monitorear precios de vuelos, hoteles y promociones. También permiten identificar los días más económicos para viajar (como martes o miércoles, cuando los tiquetes suelen ser más baratos).