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Los 10 mejores senderos de la Patagonia, según Condé Nast Traveler

Esta selección destaca las mejores rutas de la Patagonia argentina, elegidas por expertos para vivir una experiencia auténtica en plena naturaleza.

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Leidy Barbosa
30 de abril de 2025 - 07:00 p. m.
Cada sendero incluido en esta guía ofrece una forma distinta de internarse en ese territorio mítico, donde el viento moldea la tierra y los glaciares resisten, aún, su lento retroceso.
Cada sendero incluido en esta guía ofrece una forma distinta de internarse en ese territorio mítico, donde el viento moldea la tierra y los glaciares resisten, aún, su lento retroceso.
Foto: Getty Images
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En el extremo austral de América, donde el mapa parece desdibujarse entre el viento y el silencio, se extiende la Patagonia argentina: una tierra áspera y majestuosa que desafía al viajero con su belleza indómita. No es un destino cualquiera, sino un territorio que impone respeto. Aquí, la vegetación se abraza al suelo para no ser arrastrada por el viento, los glaciares se abren paso con una paciencia milenaria, y los animales salvajes aún conservan su dignidad en libertad. Si usted ha sentido curiosidad por conocerla, Condé Nast Traveler, una revista internacional reconocida por su enfoque en el lujo y el estilo de vida, ha lanzado una lista de los mejores senderos para recorrerla.

Esta selección de rutas no surge al azar: fue realizada tras un riguroso análisis por parte de editores y colaboradores especializados, quienes evaluaron múltiples criterios —como el valor paisajístico, el nivel de conservación, la accesibilidad y el potencial de aventura— para destacar aquellos destinos que permiten vivir la Patagonia de manera auténtica.

Laguna de los Tres, Parque Nacional Los Glaciares, Santa Cruz

La Laguna de los Tres es uno de los destinos más emblemáticos del Parque Nacional Los Glaciares en la Patagonia argentina. Esta impresionante caminata de aproximadamente 20 kilómetros ida y vuelta comienza en El Chaltén, considerada la capital nacional del trekking, y atraviesa diversos paisajes que incluyen frondosos bosques de lengas y cristalinos ríos de deshielo. La última sección presenta una pendiente pronunciada que, tras superarla, recompensa al excursionista con una vista incomparable del monte Fitz Roy reflejándose en las aguas turquesas de la laguna.

La mejor época para realizar esta travesía es desde mediados de primavera hasta principios de otoño, cuando el clima es más favorable y no hay nieve en la ruta. El Chaltén, fundado en 1986, sirve como base para esta y otras excursiones en la zona, y es accesible desde El Calafate mediante un recorrido de 212 kilómetros (aproximadamente 3 horas por la ruta 40 y luego la RP23), donde también se puede disfrutar de impresionantes vistas del macizo del Torre y el Fitz Roy, especialmente al amanecer.

Cerro Tronador, Parque Nacional Nahuel Huapi, Río Negro

El Cerro Tronador es un volcán extinto de 3.478 metros de altura que se ubica en la frontera entre Argentina y Chile, separando el Parque Nacional Nahuel Huapi (Argentina) y el Parque Nacional Vicente Pérez Rosales (Chile). Su nombre proviene del estruendo similar a truenos producido por los frecuentes desprendimientos de seracs en sus siete glaciares, entre los que destaca el peculiar Ventisquero Negro, un glaciar reconstituido teñido por sedimentos. Esta montaña, cuyo origen se remonta al Pleistoceno hace aproximadamente 1.3 millones de años, ha sido erosionada por la acción glaciar hasta casi perder su forma volcánica original.

Para los amantes del senderismo y montañismo, el Tronador ofrece una variedad de desafíos, desde caminatas suaves hasta la travesía completa de 65 kilómetros que dura aproximadamente siete días. Los excursionistas pueden disfrutar de bosques andino-patagónicos, cascadas, y vistas panorámicas desde puntos como el filo del Capitán a 1.980 metros de altura.

Circuito Chico, Río Negro

El Circuito Chico es el recorrido más emblemático de San Carlos de Bariloche, un trayecto de aproximadamente 60 kilómetros que integra la ciudad, los bosques, los lagos y las montañas en un solo paisaje. Partiendo desde el centro de Bariloche por la Avenida Bustillo, este recorrido asfaltado bordea la margen sur del lago Nahuel Huapi, ofreciendo múltiples puntos panorámicos como el mirador de Puerto Bueno, el imponente Hotel Llao Llao, el Cerro Campanario (desde donde se disfrutan las vistas más espectaculares de la región), y los lagos Moreno y Escondido. A lo largo del trayecto también se puede visitar el parque municipal Llao Llao, la capilla San Eduardo, Puerto Pañuelo (punto de partida para excursiones lacustres), y Colonia Suiza con sus chacras y campings.

Esta excursión, que puede realizarse en cualquier época del año, es accesible para todos los públicos y puede completarse en aproximadamente 3 a 4 horas si se contrata con una agencia de viajes, o extenderse a todo un día si se viaja por medios propios. El Circuito Chico combina tramos pavimentados con senderos naturales, permitiendo disfrutar de playas, miradores y frondosos bosques sin alejarse demasiado de la ciudad. Durante el recorrido, los visitantes pueden descansar en numerosas casas de té, restaurantes y cervecerías para degustar la gastronomía regional, o adquirir artesanías locales como velas, tejidos, cerámicas, tallas en madera y productos de belleza elaborados a base de rosa mosqueta o lavanda.

Glaciar Martial, Tierra del Fuego

El Glaciar Martial, ubicado a solo 7 kilómetros del centro de Ushuaia, representa uno de los emblemas naturales de la ciudad más austral del mundo y forma parte del Área Natural Protegida que lleva su nombre. Este glaciar de circo, con forma de anfiteatro o semicírculo, se encuentra a aproximadamente 1.000 metros sobre el nivel del mar y debe su nombre al comandante Louis Ferdinand Martial, quien lideró la expedición científica francesa de 1882-1883. El complejo ofrece actividades durante todo el año: esquí alpino y snowboard en invierno, mientras que en verano se transforma en uno de los destinos más accesibles para el senderismo.

Desde la base del complejo, en la cota 315, los visitantes pueden ascender por la pista de esquí principal o por una variante que atraviesa el bosque subantártico siguiendo el curso del Arroyo Buena Esperanza, ambos caminos conducen a una plataforma panorámica ubicada a 515 metros de altura, tras un recorrido de aproximadamente 1.300-1.500 metros que toma unos 40 minutos. Desde este mirador se aprecia una espectacular vista de Ushuaia, el Canal Beagle y las montañas circundantes. Para los más aventureros, existe la posibilidad de continuar el trekking hasta el mismo glaciar, un sendero de 1.600 metros adicionales de dificultad alta que requiere extremar precauciones.

Refugio Frey, Parque Nacional Nahuel Huapi, Río Negro

El Refugio Frey, ubicado a 1.700 metros sobre el nivel del mar en el Parque Nacional Nahuel Huapi, es uno de los destinos más emblemáticos para senderistas y escaladores en la Patagonia argentina. Construido como una obra maestra del tallado en granito, este refugio, que debe su nombre al ingeniero Emilio Frey, se encuentra a orillas de la laguna Toncek de aguas verdes y frías, al pie de la aguja Frey del Cerro Catedral. El sendero tradicional para acceder al refugio comienza en la playa de estacionamiento del Cerro Catedral y recorre aproximadamente 10 kilómetros atravesando bosques de coihues y lengas, con un desnivel de 700 metros, lo que representa una caminata de unas 4 horas de dificultad baja a media.

El refugio, con capacidad para 40 personas, cuenta con una cocina y un amplio comedor con calefacción a leña en la planta baja, mientras que en el primer piso se encuentran los dormitorios equipados con colchones, frazadas y almohadas. Una vez en el refugio, los visitantes pueden disfrutar de un entorno ideal para la escalada en las agujas de granito circundantes o simplemente contemplar las vistas panorámicas del Pico Bara, la Laguna Schmoll, el Valle del Campanile y el Catedral Sur.

Paso de las Nubes, Parque Nacional Nahuel Huapi, Río Negro

El Paso de las Nubes es una travesía que conecta Pampa Linda con Puerto Frías y Puerto Blest en el corazón del Parque Nacional Nahuel Huapi, combinando senderismo y navegación. Este recorrido de 26 kilómetros con un desnivel de 680 metros debe realizarse obligatoriamente en dos jornadas, pernoctando en el Refugio Agostino Rocca ubicado exactamente en el “Paso de las Nubes”. La primera etapa del trayecto comienza en Pampa Linda, desde una tranquera cercana a la casa del Guardaparque, y tras 4 a 6 horas de caminata se llega al refugio. Es fundamental reservar con anticipación tanto el alojamiento en el refugio como los tickets de navegación, ya que una vez iniciada la caminata no hay forma de contactar con estos servicios.

La segunda jornada, partiendo temprano desde el refugio Rocca, inicia con un pronunciado descenso hasta las orillas del río Frías, donde el paisaje se transforma gradualmente en una exuberante selva valdiviana debido a la humedad proveniente del cercano océano Pacífico. Este tramo de 12 kilómetros está señalizado con carteles que indican la distancia recorrida y restante, incluyendo un puente colgante sobre el río Frías en el kilómetro 9. Durante todo el recorrido, los senderistas pueden disfrutar de vistas ininterrumpidas de montañas, glaciares, extensas arboledas, y con suerte avistar cóndores, mientras exploran uno de los entornos más vírgenes de la Patagonia.

Sendero Tierra de Colores, Parque Nacional Patagonia, Santa Cruz

El Sendero Tierra de Colores, ubicado en el Parque Nacional Patagonia en la provincia de Santa Cruz, ofrece una experiencia única que contrasta con los típicos paisajes de bosques y picos nevados de la región. Esta caminata de baja dificultad y corta extensión atraviesa la inmensidad de la estepa patagónica, donde formaciones rocosas adquieren sorprendentes tonalidades rojizas, violetas, ocres y amarillas como resultado de la oxidación de minerales.

El contraste de estos colores con el amplio cielo patagónico crea un escenario cautivador, permitiendo a los visitantes no solo maravillarse con este peculiar paisaje geológico, sino también observar fauna autóctona como guanacos y choiques mientras se adentran en la vastedad de la meseta.

Mirador del Cerro Torre, El Chaltén, Santa Cruz

El Mirador del Cerro Torre representa una de las caminatas más accesibles y gratificantes del Parque Nacional Los Glaciares, ofreciendo un panorama espectacular con apenas 7 kilómetros de recorrido total. El trayecto, de dificultad baja y realizable durante todo el año, comienza con una pendiente suave que atraviesa un bosque de lengas y bordea el río Fitz Roy, llegando primero al Mirador Margarita, donde ya se obtiene una vista panorámica de los cerros Solo, el cordón Adela, el Cerro Torre y el Cerro Chaltén, además de la cascada Margarita al otro lado del río.

Tras aproximadamente una hora y media de caminata, los excursionistas alcanzan el esperado Mirador del Torre, un balcón natural señalizado con un cartel descriptivo del Parque Nacional. Desde este punto privilegiado, en los días despejados se disfruta de una incomparable vista panorámica del imponente Cerro Torre con sus características agujas de granito, el cordón Adela, el glaciar Grande y la laguna Torre, conformando uno de los mejores panoramas de toda la región patagónica.

Sendero a Bosque de Arrayanes, Parque Nacional Los Arrayanes, Neuquén

El Bosque de Arrayanes, ubicado en la península de Quetrihué dentro del Parque Nacional Los Arrayanes, es uno de los pocos lugares en el mundo donde se puede contemplar una concentración única de estos árboles de corteza color canela. El sendero de 11 km que parte desde Villa La Angostura ofrece una experiencia de baja dificultad tanto para caminantes como ciclistas, con magníficas vistas al lago Nahuel Huapi durante todo el recorrido.

Al final del camino, los visitantes son recompensados con el espectáculo místico de los arrayanes y una pintoresca cabaña donde descansar y disfrutar del entorno. La excursión puede complementarse con un paseo en barco desde Bahía Mansa, permitiendo combinar navegación y caminata para una experiencia más completa.

Lagos Escondido y Fagnano, Tierra del Fuego

Los lagos Escondido y Fagnano, son un destino oculto en el sur de Tierra del Fuego, que se conectan mediante un circuito de 10 kilómetros que atraviesa bosques de lengas y turbales, ofreciendo a los caminantes una experiencia inmersiva en paisajes vírgenes.

Esta ruta de dificultad moderada permite apreciar panorámicas espectaculares donde las montañas se reflejan en estos espejos de agua: por un lado, el íntimo Lago Escondido, abrazado por el entorno; por otro, el imponente Lago Fagnano, que sorprende por su extensión. Durante el recorrido, los visitantes tienen la oportunidad de observar la flora y fauna local mientras disfrutan de la serenidad característica de estos rincones fueguinos.

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Leidy Barbosa

Por Leidy Barbosa

Periodista de la Universidad Externado de Colombia, con énfasis en la producción audiovisual y en animación digital. Apasionada por temas medioambientales y sociales.@leidyramirezbLbarbosa@elespectador.com

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